La cuesta de enero será este año más tenue. La tradicional actualización (siempre al alza) de precios públicos y de impuestos que suele entrar en vigor cada uno de enero también se ha visto afectada por la pandemia de coronavirus que ha cambiado las vidas de los zamoranos durante este 2020. Las administraciones han “congelado” buena parte de los impuestos que afectan al común de los ciudadanos, los precios fijados por el Gobierno no se actualizarán con el cambio de ejercicio y algunos servicios básicos, incluso, bajarán de precio.

Luz, gas y carburante. La factura de la luz será más barata a partir del uno de enero. El Gobierno ha sacado de la factura de la luz la prima que se dedicaba a las energías renovables, lo que abaratará el recibo una media del 13% en los próximos años. Toda la bajada no llega de golpe, pero se dejará notar desde 2021. No sucede lo mismo con el gas. Las tarifas de último recurso (TUR) de gas natural, a las que pueden acogerse principalmente los usuarios domésticos (con consumos anuales inferiores a los 50.000 kilovatios/hora, subirán de media el 5,97% respecto a las vigentes en la actualidad. El incremento para el primer trimestre del nuevo año se debe a la importante subida que ha experimentado el coste de la materia prima en los mercados internacionales, de un 21,7%, respecto a la anterior actualización, que se empezó a aplicar el pasado 1 de octubre. Se estima que el carburante suba una media de siete céntimos por litro, aunque el Gobierno finalmente no ha aprobado la subida de la tributación del diésel, medida que levantó gran polémica.

Impuestos nacionales. De cara al común de los consumidores lo que más se dejará notar es la subida del IVA a las bebidas azucaradas, que desde el 1 de enero pasa del diez por ciento al 21%, el tipo máximo. La medida ha sido muy criticada por la oposición porque, indican, perjudica a los productores zamoranos. El IRPF sube para una parte ínfima de los contribuyentes. Quienes ganan más de 300.000 euros al año pagarán dos puntos más en 2021. Las cuentas públicas también tocan las deducciones por las aportaciones a los planes de pensiones.

Impuestos locales. Tanto el Ayuntamiento de Zamora como la Junta de Castilla y León, de muy distinto signo político, han seguido una estrategia de congelación de impuestos para el año 2021. Así lo aseguraron los responsables de las cuentas públicas de una y otra institución durante la presentación de sus respectivos presupuestos. Ambas administraciones intentarán paliar los efectos negativos de la pandemia en las pymes y familias a través de deducciones y subvenciones destinadas, fundamentalmente, a gasto social y a crear puestos de trabajo.