La segunda ola del coronavirus ha sepultado las aspiraciones de recuperación de la hostelería, que pudo ver una tímida recuperación en los meses de verano, pero cuyo negocio ha caído en picado en los primeros meses del otoño. Las cifras hablan por sí mismas: un 79% menos de viajeros en el mes de noviembre respecto a las mismas fechas del ejercicio anterior. Al evaluar las pernoctaciones, se puede comprobar cómo esa recesión ha sido del 77%, lo que significa echar por tierra todo el camino andado tras levantarse el estado de alarma decretado en marzo. Una situación insostenible para un sector que agoniza en Zamora.
Los hoteles de la provincia recibieron durante el pasado mes a 7.256 huéspedes en sus instalaciones. La cifra se encuentra muy lejos de la última comparativa, la de 2019, cuando en las mismas fechas la ocupación ascendió a 30.980 personas. El año 2020 se está tornando en una pesadilla para el sector, que no ve el momento de que todo vuelva a la normalidad. Y es que las restricciones a la movilidad impuestas por las diferentes comunidades autónomas, unidas al razonable miedo ciudadano a realizar desplazamientos que no son estrictamente necesarios, han hecho que la provincia pasara de los 17.982 viajeros en noviembre del pasado año a los 3.883 de este curso.
Las restricciones a la movilidad ponen en jaque a un sector en parálisis
Los datos ofrecidos por el Instituto Nacional de Estadística demuestran que el actual ejercicio es para olvidar. Ni tan siquiera el ligero repunte del verano ha servido para que los empresarios recuperen las pérdidas generadas por el cierre generalizado de marzo a mayo. Y es que, pese a que el año comenzaba bien tanto en viajeros como en pernoctaciones, el peso del estado de alarma y el miedo al virus ha sido demasiado para los profesionales del ramo.
El pasado mes de junio, nada más levantarse las restricciones del primer estado de alarma, la provincia recibió a 2.992 viajeros, frente a los 26.576 del año anterior. En julio mejoró y se produjo un repunte de hasta 14.552 turistas, aunque todavía eran la mitad de los que llegaron a la provincia durante el año anterior. Y en agosto, más de lo mismo. Los 21.821 viajeros que acudieron a Zamora estaban muy lejos de los 38.404 del curso anterior.
En septiembre, dentro del clima de contención de la ciudadanía, los números dieron un respiro a la hostelería. No obstante, la llegada de la segunda ola en octubre ha sido una losa para el sector. Ese mes, los viajeros fueron únicamente 9.230 y las pernoctaciones 15.757. Una cifra ínfima en comparación con las 41.591 del curso anterior, lo que ha puesto en jaque a los profesionales zamoranos.
OCUPACIÓN AL 15% Y LA MITAD DE LOS ALOJAMIENTOS CERRADOS
El desglose de los datos de la Encuesta de Ocupación Hotelera elaborada por el INE ofrece una radiografía de la situación crítica que vive el sector en la provincia de Zamora. Con una ocupación aproximada del 15% y la mitad de los establecimientos cerrados, las complicaciones se multiplican para unos profesionales que llevan meses reclamando ayudas para poder salir del bache. Unas circunstancias que no mejoran en el conjunto de la región, donde se calcula la ocupación en apenas un 13%. Los hoteles de Castilla y León computaron un total de 135.674 pernoctaciones en el mes de noviembre de 2020, un 77,58% menos que en el mismo mes del año anterior, frente a un descenso del 84,5% en el resto del país, según la encuesta de coyuntura turística hotelera publicada este martes por el Instituto Nacional de Estadística. El número de establecimientos abiertos descendió en noviembre en algo más de 300 respecto al mes de octubre, pasando de 1.044 a 739, cifra un 41,6% inferior a la existente hace un año.
El impulso del verano ha sido insuficiente para recuperar las pérdidas
Por provincias, la mayor parte de las pernoctaciones se han registrado en Valladolid, con 24.972 (107.521 el pasado año), seguida de Salamanca (24.816, frente a 80.791 hace un año), León (24.816, 80.791 hace doce meses), Burgos (21.869, 83.428 el pasado año), Palencia (10.623, frente a 23.915 hace un año), Ávila (9.388, 45.597 en noviembre de 2019), Segovia (9.157, frente a 62.087 en noviembre de 2019) Soria (7.831, 32.814 hace un año), y Zamora (7.256, 30.980 en noviembre de 2019).
