Una nutrida representación de colegios concertados de Zamora y provincia, así como miembros de asociaciones de padres, docentes y hasta políticos del Partido Popular se concentraron ayer en la plaza de la Constitución para alzar su voz contra la nueva ley educativa, popularmente conocida como ley Celaá, por la ministra del área.

Un momento de la concentración en Zamora capital. E. F.

“La ley tendrá sus bondades, que se reconocen, pero a nosotros nos preocupan dos ámbitos fundamentales, como es la supresión de la posibilidad de que los padres puedan elegir el centro donde van a estudiar sus hijos y el ataque frontal a la asignatura de religión, de nuevo. La intentan arrinconar anulando la alternativa y restando esa computabilidad académica que toda asignatura merece”, sintetizó Juan Carlos López, delegado diocesano de Educación.

Dos representantes de los convocados fueron las encargadas de leer el manifiesto que detalla las críticas a la nueva normativa y que pasan por calificarla de ley “partidista e ideológica”, insistir en los derechos de la infancia olvidando que el garante principal de los mismos son los padres o cuestionar la supervivencia de los centros específicos de educación especial.

Un momento de la concentración en Zamora capital.ç E. F.

Zamora ha sido la última de las capitales de Castilla y León —unidas en las plataforma Más Plurales— en unirse a la serie de concentraciones que se harán durante tres jueves. En el caso de la capital, las siguientes se realizarán los días 10 y 17 de diciembre, a las 18.00 horas, también en la plaza de la Constitución. “Habrá más acciones con las que daremos visibilidad a nuestro malestar, de forma escalonada, hasta el mes de febrero”, adelantó López.