El contagio por coronavirus de los dos testigos que debían comparecer en el juicio contra el guardia civil acusado de agresiones sexuales a una niña de 9 años en el cuartel de Puebla de Sanabria ha obligado a la Audiencia Provincial a suspender la vista por segunda vez. La Fiscalía pedía 48 años de cárcel y 20 de inhabilitación para el agente por considerar que los informes de los forenses y del equipo multidisciplinar de Menores constatan la credibilidad de la versión de la niña, que relató que el agente le ofrecía gominolas para que subiera a su vivienda en la que le obligaba a realizarle felaciones y donde sometió a la pequeña a tocamientos.