Con pantalones vaqueros, vestidos de flamenca, con trajes de gala adornados con cristales swarovski e incluso con ropa diseñada por Ágata Ruiz de la Prada. Estos son algunos de los modelos que luce la muñeca Nancy en la exposición inaugurada en el Museo Etnográfico de Castilla y León, que repasa los 52 años de historia de la icónica muñeca de Famosa.
La muestra, compuesta por 30 muñecas, no se queda en un recorrido retrospectivo, sino que también refleja la adaptación de la marca a los nuevos tiempos, con modelos actuales que incorporan mascarillas de protección contra la pandemia. “Se trata de una muñeca icónica de la historia del juguete español que tiene la particularidad de que pervive y se sigue vendiendo, a diferencia de otras marcas”, destaca Ruth Domínguez, conservadora del museo.
La selección pertenece a la colección personal Roberto Pérez Gómez, quien destaca que “es la primera vez que un museo realiza una exposición completa sobre la muñeca Nancy”. Sobre su carácter icónico, subraya que “todas las generaciones han tenido en algún momento una muñeca Nancy”. La colección completa de este particular asciende a más de un centenar de muñecas que ha conseguido atesorar durante los últimos 20 años.
Los distintos modelos que se exponen en el Museo Etnográfico se distribuyen en un total de diez vitrinas que no responden a un orden cronológico, sino que destacan distintos hitos históricos de la conocida muñeca. Entre ellos su uso como regalo por la primera comunión que varias generaciones conservan en su subconsciente, junto al extenso fondo de armario con el que cuenta la Nancy para cada ocasión. Dentro de este vestuario la muestra recoge tanto vestidos originales como un ejemplo de los confeccionados habitualmente de forma artesanal en muchos hogares.
La Nancy aparece acompañada en esta exposición por compañeros de aventuras, como su hermana Lesly, su amiga Selena o su “amigovio” Lucas, a los que se suman las copias diseñadas por otras marcas jugueteras y que no lograron tener tanto éxito, con modelos como Core, de BB; Fanny o Carina, de Vicma, o Nina, de Brintoi, en Portugal.
En la muestra también se puede contemplar un busto de Nancy a tamaño natural diseñado en los años 80, así como los nuevos modelos que surgieron a partir de 1996 para aprovechar el tirón de otras marcas, como Barbie o Chabel y que supusieron una reducción de su tamaño, de 42 a 29 centímetros.
De forma paralela a la exposición, cuyo objetivo es captar nuevas audiencias, el museo ha organizado de diferentes talleres temáticos, infantiles y para familias con la finalidad de profundizar en la historia de la icónica muñeca. La muestra permanecerá abierta hasta el próximo 23 de enero, de miércoles a domingo y en horario de 10.00 a 14.00 horas y de 17.00 a 20.00 horas
