Cerca de un centenar de quintos han revivido este sábado la celebración de su mayoría de edad. En este caso, han celebrado que ya han pasado veinticinco años desde que la cumplieran, allá por 1999. Por este motivo, han querido compartir una jornada de convivencia y celebración que se inició con una misa en la iglesia de Arbas, tal y como manda la tradición.
Desde allí, el grupo de hombres y mujeres recorrió algunas calles de Toro junto a la charanga, que los acompañó musicalmente, hasta la plaza Mayor. En el Ayuntamiento fueron recibidos por el alcalde, Rafael González Franco, y desde el balcón de la Casa Consistorial cantaron su copla al pueblo toresano, que se congregaba para verlos.
Los quintos retomaron fuerzas con un vermú en algunos bares de la localidad y, ya por la tarde, prosiguió su fiesta en la cafetería del hotel Juan II, donde disfrutaron de un concierto del grupo "Dos de picas", al que también pudieron asistir familiares y amigos.
Todos juntos compartieron más tarde un picoteo y la jornada finalizó con una velada amenizada por la música que se encargó de poner uno de los propios quintos.