La Junta ha finalizado las obras de rehabilitación de las paneras y de la antigua botica del monasterio del Sancti Spíritus, intervención en la que ha invertido 250.000 euros.
El consejero de Cultura, Javier Ortega, se desplazó a Toro para comprobar el resultado de la actuación ejecutada durante ocho meses en dos de las estancias más antiguas del monasterio y que, en la actualidad, carecían de uso por el deterioro de elementos estructurales secundarios y de la envolvente de la cubierta, en el caso de las paneras, mientras que en la pequeña edificación que fue utilizada como botica el tejado se encontraba hundido hacia el interior.
Destacó Ortega que, la restauración de las históricas estancias del convento “encaja” en la estrategia de la consejería de Cultura y Turismo de “dar nuevos usos al patrimonio”, una vez que se ha conseguido garantizar su conservación.
Además, subrayó que en el Sancti Spíritus la Junta ha costeado intervenciones por valor de 1,2 millones de euros, mientras que las actuaciones acometidas en Toro para preservar su patrimonio han supuesto una inversión que ronda los 8 millones.
Remarcó Ortega que además de preservar un valioso patrimonio como el que atesora el Sancti Spíritus, también es fundamental potenciar su valor cultural y turístico, a lo que contribuye la comunidad religiosa de las Dominicas que lo habitan y que han sabido adaptarse a las nuevas tecnologías para divulgar sus “tesoros” o para vender online los dulces que elaboran.
Por su parte, la priora del monasterio, Mari Cruz Bosch, destacó la importancia de las obras ejecutadas en las paneras porque, junto a la botica, son dos de las estancias más antiguas del Sancti Spíritus y “era una pena que se perdieran”.
Una vez concluida la rehabilitación de la cubierta de ambas estancias, las religiosas confían en que su interior también sea rehabilitado, con el objetivo de “poderlas aprovechar”, ya que por su amplitud podrían adaptarse a diferentes usos.
El alcalde, Tomás del Bien, acompañó al consejero de Cultura en su visita al convento y agradeció el esfuerzo de la Junta para preservar un patrimonio tan importante como el Sancti Spíritus.
Del Bien también ensalzó el trabajo de las hermanas Dominicas, tanto a nivel espiritual como en la “tutela” y conservación de un valioso legado, en alusión al monasterio sobre el que no dudó al afirmar que “es una de las mayores joyas de Castilla y León y de la Península Ibérica y que, a nivel cultural, gestionan de forma ejemplar”.
Tras comprobar el resultado de las obras ejecutadas en las paneras y la antigua botica, las religiosas guiaron a las autoridades en un recorrido por las distintas estancias del edificio y aprovecharon la visita para reclamar una mejor señalización turística del Sancti Spíritus que, como recalcaron, llevan esperando desde hace cinco años.
