El Ministerio de Agricultura ha autorizado, de forma excepcional y para la presente campaña, la siembra de remolacha azucarera con semillas tratadas con "Poncho Beta", el único neonicotinoide permitido. Esta decisión ha sido valorada de forma positiva por la organización agraria COAG que, como recordó ayer, el uso de neonicotinoides en semillas de remolacha era una práctica habitual en el tratamiento fitosanitario y permitía la aplicación de dosis mínimas y localizadas. Ante la prohibición, a finales del 2018, del uso de las sustancias activas en las semillas de remolacha, COAG solicitó al Ministerio que, al amparo de la excepcionalidad que permite la normativa europea, se estableciera un periodo transitorio de adaptación a los agricultores, "en la necesaria búsqueda de alternativas de manejo sustitutivas para combatir las plagas que afectan al cultivo".

Ante esta petición, el Ministerio ha autorizado para la presente campaña el uso de semillas de remolachas tratadas con neonicotinoides al aire libre, con el fin de proporcionar tiempo al sector para que pueda adaptarse a la nueva situación y encontrar alternativas viables. Esta autorización se limita a las semillas tratadas con "Poncho Beta" y su utilización está condicionada a que solamente se podrán sembrar estas semillas hasta el 15 de mayo, previa comunicación a la Junta.