Conflicto abierto

El bloqueo de las prisiones catalanas deja a 4.000 internos en sus celdas

Han vuelto a colocar barricada como protesta por la falta de seguridad en las cárceles tras el asesinato de una trabajadora en Mas d'Enric

Funcionarios inician cortes de acceso a cinco prisiones de Barcelona, Lleida y Tarragona.

Funcionarios inician cortes de acceso a cinco prisiones de Barcelona, Lleida y Tarragona. / EP

Germán González / J. G. Albalat

Nueva jornada de protesta en las prisiones catalanas. Tras la tregua de este domingo, trabajadores penitenciarios han vuelto a concentrarse y colocar barricadas, como neumáticos encendidos, árboles o piedras, en los accesos de la todos los centros catalanes para impedir tanto la entrada como la salida de funcionarios y presos, así como alimentos y otros servicios. 

El objetivo es generar tensión dentro de los centros con las protestas al impedir los cambios de turno, aunque en algunas prisiones se instó a los trabajadores a quedarse a dormir para garantizar el servicio este lunes. Algunos trabajadores entraron como voluntarios en Lledoners o Brians.

Desde esta madrugada centenares de funcionarios y el resto de personal laboral bloquean las cárceles de Lledoners, Ponent, Puig de les Basses, Brians 1 i 2 y Mas d’Enric. En Wad Ras se ha permitido la salida de internos en tercer grado y la entrada de suministros. 

La consellera Gemma Ubasart ha indicado que el bloqueo de este lunes afecta a unos 4.000 internos, ya que se han podido abrir las celdas de las cárceles de Quatre Camins, Joves y Brians 2, que es el centro más grande de Catalunya con 1.400 presos. Ubasart también ha remarcado que la "situación es grave y preocupante", ya que "el derecho a la protesta no puede impedir el funcionamiento de servicios esensiales". 

Así, ha añadio que hay abogados que no han podido asistir a clientes, "vulnerando el derecho de defensa", no se han podido realizar salidas sanitarias no urgentes ni hacer videoconferencias en los centros a instancias judiciales. "Estamos en una situación de restricciones que no se produjo ni en pandemia", ha indicado Ubasart y ha instado a los sindicatos a volver a la mesa de negociación para solucionar el bloqueo. El secretario de Medidas Penales Amand Calderó ha añadido los conflictos que pueden producirse, ya que los internos deben comer y cenar en sus celdas sin poder salir.

El punto con más conflictividad fueron los accesos a Quatre Camins y Joves, ya que se intentó el bloqueo, pero agentes de los Mossos enviaron varias unidades de antidisturbios para que se dejara un carril abierto al acceso de mercancías y personal. Aquí los sindicatos han denunciado que han tenido enfrentamientos con el director del centro, que les afeó su actitud esta madrugada, por eso también reclaman su dimisión junto con la de la consellera Gemma Ubasart y el secretario de Medidas Penales Amand Calderó.

A diferencia de las jornadas anteriores, hay más presencia policial este lunes en las principales prisiones catalanas para garantizar la normalidad del servicio en los centros, ya que las protestas del viernes y del sábado pasado generaron problemas de convivencia cuando miles de presos no pudieron salir de sus celdas al no haber personal suficiente y no se dejó acceder a familiares para las visitas. Los Mossos realizaron dispositivos para impedir los bloqueos pero únicamente se consiguió en Quatre Camins y Joves.

En este sentido, fuentes policiales remarcan que la intención es garantizar los cambios de turno y el acceso de los funcionarios que quieran entrar a trabajar dentro de las prisiones, aunque sea a pie dejando aparcado el coche más lejos por el bloqueo de los manifestantes. El Departament de Interior junto a las fuerzas de emergencia ha creado un centro de control para monotorizar estas protestas, después de la conflictiva jornada del viernes en la que las prisiones estuvieron bloqueadas durante más de 14 horas y 5.000 internos no pudieron salir de sus celdas.

Desde Justicia se indica que Brians 2, Quatre Camins y Joves podrán abrir las celdas sin actividad, mientras que Mas d'Enric, Ponent, Puig de les Basses, Lledoners, Wad-Ras y Brians 1, con 1.200 internos no abrirán celdas. En una carta al personal penitenciario, la Secretaría de Medidas Penales del Departamento de Justicia asegura que el bloqueo "conllevan un incremento del riesgo para todos nosotros, y que el perjuicio ocasionado a terceros (profesionales, personas internas y sus familiares) puede precipitar situaciones críticas". 

Además, señalan que las protestas pueden "precipitar situaciones críticas a los centros que no favorezcan en ningún caso la imagen del colectivo penitenciario, ni la superación de la situación actual ”. En este sentido, se insta a un encuentro entre Departament y sindicatos para “enderezar la situación con la máxima sensibilidad y empatía”, aunque los representantes de los trabajadores se han negado hasta que no hayan dimisiones o ceses de la cúpula de Justicia.

"La seguridad y el respeto hacia nuestros trabajadores y trabajadoras son prioridades absolutas", destaca Justícia en su carta a los empleados penitenciarios y les insta a "enderezar la situación" con medidas que eviten sitaciones como el crimen de la cocinera de Mas d'Enric a manos de un interno, como ocurrió la semana pasada.

El Observatori del Sistema Penal i els Drets Humans ha destacado que la situación en las prisiones es "muy grave", ya que hay "miles de personas presas aisladas ilegalmente y miles de familias afectadas sin comunicaciones". "Las demandas sindicales no pueden basarse en vulnerar aún más los derechos básicos de las personas presas", han añadido.