Estamos en Ecuador. Es el velatorio de una mujer de 76 años llamada Bella Montoya Tapia. Pero sorpresa, no está muerta, sino viva. Los sanitarios certificaron su muerte por un paro cardiorrespiratorio. El ataud empezó a temblar para desconcierto de los asistentes y al abrir la caja, se encontraron con que el corazón de Bella, no había dejado de latir. Los servicios sanitarios la trasladaron de nuevo al hospital donde fue ingresada en la unidad de cuidados intensivos. La ministra de salud del país ha confirmado que se ha abierto una comisión de investigación del caso para averiguar qué fue lo ocurrió.