Mantener unos glúteos tonificados es una de las preocupaciones que a día de hoy más se extiende entre todos aquellos que entrenan regularmente. Casi tanto como el de lucir vientre plano o incluso eliminar la celulitis. Sin embargo, tendemos a olvidar la importancia que tiene este grupo muscular en nuestro día a día, más allá de las razones estéticas.

Independientemente de que queramos lucir unos glúteos tonificados este verano, los ejercicios para fortalecer esta región corporal ayudan también a estabilizar la pelvis y columna vertebral, y tener mayor potencia en gestos explosivos. Así como contrarrestar los efectos de pasar largas horas sentados frente al ordenador.

Los glúteos se pueden entrenar de distinta manera y con elementos diversos, pero una manera muy interesante y simple de hacerlo es con el apoyo de la tecnología que se ofrece en el club. Esta forma de entrenamiento es válida para cualquier persona sin importar cuál sea el nivel previo de entrenamiento, ya que los equipos se ajustan a los niveles de quien los use y brindan una amplia gama de ejercicios que ayudan a potenciar los glúteos.

Algunos ejercicios

Para ello, los expertos en Fitness del Club Metropolitan te facilitan los mejores aparatos con los que trabajar, a través de diferentes ejercicios, de forma focalizada la zona de los glúteos, y así poderlos introducir en tu rutina de entrenamiento:

  • Hip thrust: el ejercicio definitivo para los glúteos. Este término hace mención a un ejercicio muy específico de extensión de cadera que incide de forma muy localizada en el glúteo mayor, aunque también inciden en la musculatura paravertebral y en los extensores de la rodilla. El glúteo es uno de los músculos más potentes del cuerpo humano, con una gran capacidad para movilizar cargas. Sin embargo, es importante también saber que está compuesto mayoritariamente por fibras lentas (65% aprox) por lo que es importante combinar un trabajo de bajas repeticiones, pero cargas elevadas y, por otro lado, cargas medias y a un alto volumen de repeticiones. De modo que generemos fatiga que estimule el crecimiento muscular.
  • Sentadilla Búlgara: la sentadilla búlgara consiste en la realización de sentadillas a una sola pierna, apoyando la pierna libre sobre un banco o cualquier otro objeto elevado, situado detrás nuestro. Al realizar el ejercicio unipodal, nos obligará a generar mayor fuerza, así como una mayor activación del glúteo por la estabilización que debe generar. Para una menor activación del cuádriceps y que el ejercicio obligue a trabajar el glúteo mayor, es importante tener en cuenta la colocación de pie delantero. Este debería estar, en el punto más profundo del ejercicio, justo alineado debajo de la rodilla (a la vertical), notaremos un matiz muscular distinto en función de si este se encuentra por delante o por detrás de la rodilla.
  • Abducciones de pierna: la abducción consiste en separar el pie lateralmente de la zona medial del cuerpo. Las abducciones se realizan por la activación del glúteo medio. Estas las podemos realizar en pie, colocando una goma (miniband) alrededor de nuestros tobillos, así como en la ejecución de planchas laterales, en las que también se activará en glúteo medio para mantener la postura.
  • Bicicleta/caminar: montar en bicicleta o caminar (particularmente cuenta arriba), propician una activación repetitiva del glúteo mayor y del glúteo medio (trabajo unipodal), que nos pude ser de utilidad para entrenar ambos músculos.