La población vegetariana no para de crecer y los más jóvenes son el principal motor de cambio. Por eso no es de extrañar que muchas familias adapten para los niños el modelo de alimentación que habían seguido en casa por una dieta veggie, más verde, mejor para el planeta.

Pero eso significa que también se planteen dudas: ¿Es saludable esta forma de comer? ¿Afecta a su crecimiento?

Nos acompaña Noelia López, nutricionista de Nestlé España para ayudarnos a despejar estas dudas.

Época de cambios

En la infancia los cambios fisiológicos son incuestionables: el ritmo de crecimiento aumenta y consecuentemente el apetito y las necesidades energéticas.

Pero no hablamos solo de cambios físicos, sino que también hay un importante crecimiento a nivel emocional: en esta etapa de la vida se comienzan a fijar los ideales y, como individuos, buscamos un hueco en la sociedad.

Es en este momento, según indica Noelia López, cuando se empiezan a atisbar ciertos intereses, como puede ser la sostenibilidad o la alimentación veggie.

Todos los cambios, sean de mentalidad o físicos, se deben tener presentes cuando queramos valorar si nuestro hijo o hija come variable, sano y suficiente.

¿Pueden los niños seguir una dieta veggie?

Pero la pregunta que se formula es clara: ¿Es o no es compatible una dieta veggie con las necesidades de los niños?

Y es que se trata de un periodo vulnerable desde el punto de vista nutricional, ya que todavía se están asentando los hábitos alimentarios, hábitos que nos acompañan a lo largo de nuestra vida y que además pueden ser clave para evitar futuras enfermedades.

El miedo a lo desconocido, añade la nutricionista, es lo que lleva a los padres a asustarse ante cambios de este tipo, por lo que saber las razones por las que el niño quiere cambiar su alimentación es esencial.

Motivos de cambio

¿Qué puede propiciar que sea el menor el que quiera propiciar este cambio de alimentación? Lo cierto es que normalmente se asocia con:

  • El aumento del interés por la sostenibilidad.
  • Respeto por los animales.
  • Salud.

Pero debemos tener cuidado con el cambio de dieta como consecuencia de un trastorno alimentario. En esta situación, es importante que los padres se muestren atentos y verifiquen que la alimentación que siguen sus hijos es la correcta.