El pasado día 18 fallecía Ángel, nuestro querido padre, después de una larga enfermedad, sin apenas poder moverse en los últimos años.

Con estas breves palabras, queremos hacer llegar nuestro agradecimiento a las trabajadoras del Servicio de Ayuda a Domicilio del Ayuntamiento de Zamora. Sin ellas, no hubiese sido posible mantenerlo en nuestra casa.

Nos gustaría destacar que vuestro trabajo es tremendamente valioso. Pero no solo ha sido trabajo. No sois ni médicas ni enfermeras, pero a veces os aseguro que lo parecíais. Y, sobre todo, humanas y cariñosas con nuestro padre, y con nosotros y nuestra madre.

Puede que algunas personas no valoren vuestro servicio, pero sabed que es muy importante.

Berna, Mª Carmen, Rebe, Beatriz, Paz, con vuestros nombres va nuestro cariño para todas las que nos habéis ayudado durante tanto tiempo, pero especialmente para vosotras, que habéis estado en lo peor. Sin olvidarnos de Almudena y Eva que desde la oficina hacían lo que podían y nos atendían para que todo fuera bien. También nos acordamos de Emma del CEAS Norte, que nos escuchó y ayudó siempre.

Si alguna vez no supimos estar a vuestra altura, perdonadnos. Gracias y seguid así.

Pilar y Andrés Macías