Zamora ya no está aislada, que en la historia la pusieron / los que al llamarnos traidores con su vida respondieron / y en el Campo la Verdad en buena lid compitieron. / “No se ganó en una hora” –eso fue lo que dijeron.

Por ello siglos más tarde, cuando ambiciona gobiernos / en Murcia, Madrid, Castilla con su León que es bien fiero, / el partido Ciudadanos que se proclama de centro / y en vez de al lado derecho se escora hacia el lado izquierdo, / con mociones de censura revolviendo el gallinero / político en toda España, contra el PP se volvieron.

Como quiera que en Zamora en la dipu convergieron / en su día como en Murcia, y ahora cambiaron los fueros. / Por si acaso en la provincia con estos sus devaneos / pudieran ser obligados a hacer cambios duraderos / o políticas de izquierdas o al menos no usar el “dedo”, / los diputados de IU preguntamos a Requejo: / ¿No se acuerdan como Sancho que un rincón se le olvidaba, / a la vera de Viriato, Zamora bien traicionada, repartiendo subvenciones a dedo, cual denunciaban / cuando los de Ciudadanos se encontraban en campaña / antes de obtener el puesto como en Murcia y en España?

“Aquí no se cambia nada, con mi persona respondo” / Mientras sea Presidente (eso es lo que yo supongo).

En España con los cambios las cosas sí se alteraban. / Mas tranquilos que en Zamora las cosas no cambian nada: / y por ello el Presidente el remanente aumentaba / hasta setenta millones y en siete ya superaban / lo que para todo el año el presupuesto marcaba.

Setenta y siete millones en los bancos esperaban / que se hicieran carreteras, caminos, obras paradas. / Que los dineros del COVID a las empresas llegaran, / pues de los cinco millones el diez por ciento entregaban / y con medio milloncejo a todos les contentaban. / El resto a los remanentes, que cada año engordaban / al principio por Montero que a ahorrarlos nos obligaba, / y ahora porque los gestores muy despacio gestionaban.

“¿Será que trabajan poco?” Eso es lo que preguntaba / de la dipu expresidenta donde es ahora concejala. / “El alcalde de Zamora trabaja a media jornada” / (Decía al ver los remanentes que ni siquiera alcanzaban / los que ella dejó en la dipu el año en que la cesaran). / Si el alcalde no trabaja…en la dipu bostezaban / dormidos en los laureles, pues el doble no gastaban / que los del ayuntamiento ¡Pues no trabajarán nada! / Porque gestores son buenos - algo que nadie dudaba. / Como no dudaba nadie que en verdad lo que pasaba / es que el alcalde su sueldo a la mitad recortaba.

El caso es que el remanente que ya es una millonada / no se gastará en ayudas al COVID como esperaban / ayuntamientos, empresas, autónomos que se ahogaban, / parados de la provincia que por miles aumentaban.

La provincia se vacía mientras se llenan las arcas / de la institución que fiera en Zamora se volcaba / reclamando y defendiendo frente al Gobierno de España / lo que aquí niega a su gente. Pues buen ejemplo no daba.

A las gentes de Zamora que Monte la Reina esperan / llenarla con militares funcionarios de carrera, / como prometió el gobierno, la oposición, la cantera / de todo el arco político cuando la campaña fuera…

Y que también se ilusionan con la biorrefinería / que propuso un zamorano al que nadie caso hacía / hasta que la dipu al fin un terreno prometía / para ayudar al proyecto aunque en pequeña cuantía. / Al ver nuestros diputados que no iba muy de prisa / preguntamos por su marcha, por si problemas había / ayudar en lo posible, o despejar en un día / las dudas que su retraso en la sociedad ponía. Pues nos cayó la del pulpo, algo que nadie esperaba / pues pensábamos que todo iba por la buena marcha.

Preguntamos por el nombre de la empresa a quien se daba / el terreno de Barcial que la institución compraba / porque en todos los papeles que a disposición estaban / no se citaba su nombre, y se eludía nombrarla. / “Mala intención”, nos dijeron, que teníamos en el alma / al no ser proyecto nuestro – pese a que IU siempre apoyaba. / Por hablar hasta nombraron la obra del Banco de España / que nosotros heredamos y que se les atraganta / a toditas las empresas que son adjudicatarias…

Pero no dieron el nombre: “el constructor no importaba”. / Dijeron de este terreno que la institución compraba / con el dinero de todos, son trescientos mil del ala, / para ceder a una empresa de cuyo nombre no se habla. / Pues donde no había dudas, ellos las dudas sembraban.

Eso sí, ya es inminente, inminencia no faltaba. / Pues cuantas más inminencias, el fin más aún se retrasa.

Inminente es que la gente no merece lo que pasa / y que el momento es muy duro en Zamora y en España / para andar sembrando dudas. Certezas son lo que falta. / Porque la pandemia sigue y con ella se amenaza / nuestra salud, el trabajo, la convivencia, el mañana…

Menos “moción de censura”. Censuremos lo que pasa / si no estamos a la altura de la gente que trabaja.

(*) Portavoz de IU en la Diputación de Zamora