Durante los días 14 y 15 del presente mes asistí en la ciudad de Salamanca, en el inigualable marco de la Sala de pinturas del Colegio Arzobispo Fonseca, a los diversos talleres organizados, bajo tu dirección, en la "Escuela de Gobierno del PSOECyL". Me interesaban fundamentalmente dos temas: la despoblación y tu discurso de clausura porque, como Candidato a la Presidencia de la Junta de Castilla y León, se había rumoreado en el partido que ibas a explicar el programa con el que te vas a presentar. Quizás yo estuviera demasiado impresionado por los datos estadísticos que se habían dado sobre las causas de la despoblación en la comunidad deCastilla y León pero me pareció que estuviste fantástico y que tienes un programa que puede ayudar a revertir el fenómeno de la despoblación y de paso corregir algunos desmanes del proyecto del PP como el de evitar que la Sanidad Pública pase al sector privado.

En esta comunidad autónoma un sector muy importante de la población, y en algunas comarcas mayoritario como el de los jubilados, hace tiempo que perdimos la capacidad de luchar para alcanzar la meta de nuestros proyectos. Si salimos a la calle a protestar para que se garanticen las pensiones de las generaciones que nos preceden y de paso pedimos que se actualicen las nuestras, al menos con arreglo a IPC es porque tenemos miedo o estamos irritados porque no vemos el camino despejado. Espero que en las próximas elecciones no hagamos lo que los andaluces. Ya sabemos querido Luis que los jubilados somos los perdedores de la globalización pero aunque en esas elecciones han optado por elegir aquello que consideran que mejor expresa su cólera contra el poder establecido, tengo el convencimiento de que se han equivocado. Si nos fijamos detenidamente, el número de personas que allí han votado a los partidos que creen que mejor representa su irritación, ninguno ofrece solución a los problemas que parece que está en el origen de su indignación. Es decir, han votado para castigar a los que consideran el germen de sus problemas.

La regularidad en las democracias parece haberse roto porque las instituciones que nos representan, partidos políticos, sindicatos y los medios de comunicación tradicionales han perdido autoridad. Hoy una buena parte de la población la única fuente de información que consultan es la creada por medio de las redes sociales, que en la mayoría de los casos, sólo difunden mensajes emocionales disparatados. Por supuesto que todos tenemos alguna responsabilidad porque, aunque sea en una medida muy pequeña, difundimos la noticia que centrifuga el disparate anterior por muy inverosímil que sea.

De tu disertación tomé nota de cuatro o cinco cosas que me parecieron las más relevantes que expongo por el mismo orden en que las hiciste: primera, petición al PP para que apoye la propuesta del Gobierno actual de subir el salario mínimo a 900 euros, petición denegada Luis. La segunda, bajada de las tasas universitarias un 20% y libros gratuitos para que todos los jóvenes, independientemente de su poder adquisitivo, puedan completar su formación básica y apoyar a los alcaldes para que tengan más competencias en temas sociales.

Cuando visito alguna residencia de ancianos me deprime ver las condiciones en que envejecemos, todo lo que se avanzó con la Ley de Dependencia ha desaparecido con los recortes y copago sanitario, esto no va de estabular a los que viven en una situación de vulnerabilidad, sin un apoyo familiar o con pocos recursos porque tienen derecho a una vejez digna.

He notado que te apoyas en la experiencia del organizador de esta comunidad autónoma y su primer presidente, Demetrio Madrid, pero sabes que ahora te toca trabajar a ti para seguir avanzando y que gracias al apoyo de los castellano-leoneses las futras generaciones puedan izar nuevas banderas de libertad.

(*) Concejal del PSOE en el

Ayuntamiento de Peñausende.