Y tanto. Cómo es posible que el Gobierno de España destinara 4000 policías, francotiradores, tres anillos de seguridad, desplegados en un radio de un kilómetro desde el Bernabéu, y en cada anillo controles exhaustivos y cacheos desde primera hora de la mañana del domingo y sin embargo pasara olímpicamente de la actuación de los Comités de Defensa de la República, ese invento independentista catalán, que volvieron a actuar impunemente cortando autopistas como la AP-7 e irrumpiendo en la zona de peajes también de la C-16 y AP-2, levantando barreras, por lo que los vehículos las franqueaban sin pagar?

Conocemos sobradamente como se las gastan los CDR, luego con levantar las manos en actitud cobarde y decir que ellos no han sido, al cabo de la calle. El gobierno de España se está dejando meter miedo y lo peor, está dejando actuar a la kale borroka catalana sin impedirlo, sin utilizar las herramientas que la Constitución le proporciona. La Cataluña independentista sí que está 'asalvajada', gracias precisamente a las intervenciones de esta gente que no tiene otro pito que tocar que reventar la democracia, que desunir, que mentir. Cataluña ya no es lo que era: un referente para infinidad de españoles. Ahora, allí, en el feudo de Torra y Puigdemont, llamarse español conlleva el insulto y la agresión, cuando resulta que ellos son también españoles, por mucho que se empeñen en apostatar de su nacionalidad.

Los CDR son como el caballo de Atila, por donde pasan no vuelve a crecer la hierba, por donde pasan dejan huella, tal y como han hecho en la C-16, inutilizando las barreras de los peajes de Gerona y L'Hospitalet de l'Infant en Tarragona. Ni un Mosso catalán ni un Policía Nacional. Cataluña está descabezada y el Gobierno de España no reacciona cortando por lo sano. No hace falta emplear violencia alguna, basta con aplicar la Ley. No podemos ir a poner orden a Afganistán, cuando en un pedazo de territorio español llamado Cataluña están pasando cosas tremendas y que nadie quiete un ápice de verdad a lo que allí sucede, ahora casi a diario.

Muchas familias zamoranas tienen hijos en Cataluña y por sus hijos saben sobradamente lo que ocurre a diario y lo mal que lo están pasando. El pan lo tienen allí, pero la seguridad la tienen aquí. Los CDR son equiparables a las juventudes hitlerianas, sólo que sin uniforme, salvo el lazo amarillo que los identifica, juventudes establecidas para crear un nuevo sistema de adiestramiento, con el fin de desarrollar su entendimiento y obediencia a la ideología nazi. Estos de los CDR desarrollan su entendimiento y obediencia a la ideología 'nazional'-catalanista de Torra y compañía. Tienen tantos puntos en común, que asusta. Por eso no se entiende que mientras estos campan por sus respetos, el Gobierno de España destinara tantos efectivos y tan bien pertrechados, a un partido de futbol por muy de alto riesgo que fuera. Más alto riesgo que hay encontrándose con varios miembros de esas manadas llamadas Comités de Defensa de la República, no la tienen ni aunque se hubieran venido para España todos los hinchas de Boca Juniors y del River Plate argentinos.

Por lo que se ve y se sabe, el presidente del Gobierno de España prefiere seguir viajando y batiendo récords, esta vez al XI Congreso del Partido Socialista Europeo que se ha celebrado en Lisboa y a Marruecos. Estoy convencida de que si se produce un movimiento telúrico de 10 en la Escala de Richter, apueste lo que quiera a que le pilla volando.