Quienes son un referente nacional e internacional en la lucha contra la delincuencia, en la lucha contra el crimen, están de celebración. La Policía Nacional de Zamora, celebra esta mañana a las doce, en el salón de actos del palacio de La Alhondiga, el 194 aniversario de su fundación. Casi dos siglos de historia. La de un Cuerpo comprometido con la sociedad española y por ende zamorana cuyo constante proceso de modernización le permite adaptarse y enfrentarse con profesionalidad a las nuevas fórmulas delincuenciales, a veces sorprendentes por su sofisticación y por su dureza.
Unos amigos policías me han pasado información sobre el origen de este Cuerpo 10 de Seguridad del Estado. Su historia, parece que se remonta a 1824, cuando el Rey Fernando VII firmó la Real Cédula por la que se creaba la Superintendencia de la Policía General del Reino, origen del actual Cuerpo Nacional de Policía. Curiosamente, a lo largo de estos casi dos siglos de historia ha llegado a tener hasta siete denominaciones distintas. La Policía Nacional es, sin duda alguna, uno de los Cuerpos de los que más orgullosa se muestra la sociedad española en general. Su ámbito, como todo el mundo sabe, es urbano. Las grandes ciudades, las capitales de provincia son su marco de actuación.
Desde luego, ofrece una tranquilidad tremenda observar a una pareja de la Policía Nacional o a uno de sus coches patrulla, por las calles de esta ciudad nuestra que en estos días ha contado con demasiados episodios de sustracción de billeteros en medio del bullicio de las rebajas. Quienes lo perpetran, lo hacen con tanta limpieza que ni te enteras, ahora, de ser pillados, que a nadie le quepa duda que siempre hay un policía nacional cerca. Y eso da una cierta seguridad, aunque es verdad que no hay que bajar la guardia y no hay que ponerle las cosas fáciles al ladrón.
Dentro de esta conmemoración se celebra también el homenaje y entrega de diplomas a los Policías jubilados en 2017. Ignoro si han sido muchos o pocos. Lo que si me gustaría saber es de cuantos miembros se compone el Cuerpo Nacional de Policía en Zamora y si son suficientes para atender las necesidades de esta ciudad y de sus habitantes.
Estoy convencida de que a día de hoy, para la mayoría de ciudadanos, nuestra Policía es motivo de orgullo permanente. Mantienen a raya la delincuencia y los números hablan a su favor. Estadísticamente, Zamora es una ciudad con un bajo índice de delitos de todo tipo, detalle del que presumen los representantes políticos y del que es responsable, en exclusiva, la Policía que no presume de nada, que trabaja denodadamente y lo hace con eficiencia y eficacia en aguas tan procelosas como el terrorismo, la ciberdelincuencia, la trata de seres humanos, la delincuencia organizada o la maldita violencia de género que no remite.
