Aunque el pasado haya sido bello y feliz, lo que verdaderamente importa ahora es el porvenir.

Aunque hayamos amado la belleza y hayamos cultivado el pensamiento lo que ahora nos debe importar es el porvenir.

Ese misterioso y fantástico camino que debemos hallar con precaución, pero con valentía y ganas de vivir.

Aunque el pasado y el presente hayan tenido su importancia, lo que verdaderamente ha de importarnos es el futuro, ese enigmático proyecto que debemos seguir compartiendo, unidos los dos a esta familia y amistades que con tanto cariño y a veces incomprensiones hemos podido y sabido reunir y dar forma junto a nuestro amor.

Por todo ello, aquí y ahora, hago la promesa de seguir compartiendo la mesa de la armonía y de la delicada y misteriosa mariposa de los sueños, que siempre me han acompañado como amigo verdadero, sin los cuales no habría podido subsistir.

Y en esos momentos para mí muy íntimos y especiales te doy un abrazo, todo lo fuerte que mis menguadas fuerzas, puedan apoyar.

Después de tanto tiempo, es un misterio feliz y espero que compartido, mi amor y respeto por ti.