La princesa de Asturias ha reabierto la polémica sobre la elección de su atuendo para acudir a los actos oficiales, al asistir al 20º aniversario del Instituto Cervantes con unas bailarinas valoradas en 500 euros. Se trata de unas Pretty Ballerinas con cristales de Swarosky incrustados.

Es el modelo Marilyn en color arena y con cristales sin pulir y cosidos de forma artesanal. Además, es el par más caro de la colección de la firma de Jaime Mascaró que también han comprado celebrities como Úrsula Corberó, Natalia Verbeke, Ane Igartiburu, Marta Torné, Laura Ponte, Vicky Martín Berrocal o Nieves Álvarez.

No es la primera vez que Letizia se sube a unas Pretty Ballerinas. Hace tres años, un miembro de la Casa Real adquirió varios modelos de esta marca para Letizia. Desde entonces, la princesa se ha convertido en toda una seguidora de este tipo de calzado. A raíz de esto, Letizia ha sido objeto de numerosas críticas en foros y en redes sociales como Twitter.

Pero no es la primera vez que la princesa acapara la atención de la prensa por su atuendo, ya que hace un mes Letizia llevó un vestido de la firma de Amancio Ortega de un precio de 39,95 euros para asistir a una reunión que mantuvo junto al Príncipe de Asturias con los patronos de la Fundación Príncipe de Girona. Este hecho también fue mal visto por los medios.