El curriculum vitae es algo más que nuestra carta de presentación. El documento que nos define ante la empresa a la hora de buscar trabajo debe ser conciso, adaptado al puesto al que aspiramos y, en resumen, un valor añadido que debe servir para diferenciarnos en los procesos de selección

Cuando uno envía su postulación a algún puesto de trabajo, querría tener una respuesta cuanto antes. Lo ideal sería a la media hora... y adiós ansiedad. Sabemos que eso no ocurre prácticamente nunca y que nos tenemos que armar de paciencia. ¿Pero cuánto tiempo? ¿Qué sucede si pasan semanas enteras y no llega ninguna respuesta? ¿Qué se puede hacer?

  • Enviar una consulta: se recomienda que este paso dependa del tamaño de la compañía. "Si es una empresa grande, yo no lo haría antes de que transcurrieran cuatro semanas", dice la asesora laboral Maja Skubella de Hamburgo, que estima que por lo general puede llevar aproximadamente un mes que todas las personas competentes revisen las postulaciones. En cambio, si la empresa es mediana o pequeña, está bien preguntar un poco antes, por ejemplo, después de dos semanas.
  • Por supuesto, allí lo fundamental es la actitud: no hay que plantear una queja por la falta de respuesta, sino consultar con total amabilidad en qué estadío está la evaluación de postulaciones.
  • Entrevista personal: después de una entrevista también hay que tener paciencia. Para evitar la desesperación, lo mejor es preguntar al finalizar la entrevista cómo sigue el procedimiento de selección. Muchos olvidan hacerlo porque tienen la mente en otra cosa y están demasiado nerviosos, pero para el tiempo de espera que le seguirá a la charla es muy útil tenerlo presente.
  • Saber que hay que esperar: si te postulas por primera vez, la sorpresa puede ser mayúscula. Uno debe calcular que entre que envía el CV y firma el contrato pueden llegar a pasar entre cuatro y seis meses. Esa es la experiencia de Skubella.