El PSOE volvió a ganar las Elecciones Generales en Zamora capital. Eso sí, por un margen más estrecho que en abril. Los socialistas se impusieron al Partido Popular con una ventaja de tres puntos y medio. Hace seis meses, esa distancia había sido de casi el doble. De hecho, el terreno recuperado por el PP en la ciudad marcó la diferencia en el resultado global y permitió a la formación de centro-derecha volver a situarse como primera fuerza en la provincia.

A pesar de todo, el PSOE también creció en porcentaje de voto, al pasar del 31,24 al 33,37%. Los socialistas obtuvieron 11.353 sufragios y confirmaron su éxito en la ciudad de la mano de un candidato que había obtenido un resultado mucho peor en las pasadas Elecciones Municipales del 26 de mayo. En la cifra total de papeletas, la formación encabezada por Antidio Fagúndez perdió 410 apoyos, pero esa realidad también tiene mucho que ver con la bajada de la participación en la capital.

Por su parte, el Partido Popular se quedó a medias. Por un lado, no consiguió regresar a su estatus como primera fuerza en la ciudad en unas Elecciones Generales pero, por el otro, recuperó fuelle después del batacazo del 28 de abril. La candidatura liderada por Elvira Velasco superó la barrera psicológica de los 10.000 votos y obtuvo 800 apoyos más que en los comicios de la pasada primavera.

Esa circunstancia elevó su porcentaje de voto en la ciudad hasta el 29,81% y consolidó su posición como la fuerza dominante en el centro-derecha, después de un 28A en el que Ciudadanos se había quedado a tan solo cinco puntos de los populares. En esta ocasión, la distancia con la tercera fuerza, que esta vez fue Vox, llegó a los trece puntos, por lo que la brecha se abre para el bipartidismo. De hecho, entre el PP y el PSOE, el porcentaje de voto en Zamora capital subió del 55 al 63%.

En el caso de Vox, el resultado de la ultraderecha en Zamora capital fue mucho mejor que el del 28 de abril, pero se quedó medio punto por debajo del total de la provincia. De hecho, solo con los resultados de la ciudad, Pedro Requejo Novoa no habría obtenido su escaño. El partido de Abascal logró aquí un 16,65% de los apoyos.

En cifras concretas, Vox consiguió 5.663 votos en la capital, 1.300 más que el 28 de abril, una cantidad muy respetable a tenor de la participación y que permite a la ultraderecha casi duplicar a la cuarta formación, que fue Unidas Podemos.

En lo que se refiere a la formación morada, lo sucedido en la capital fue en consonancia con lo que ocurrió en el resto de la provincia. De nuevo, el candidato de la coalición, Alejandro Rodríguez, obtuvo un mejor resultado en la ciudad que en el resto de la circunscripción, pero aun así bajó con respecto al 28 de abril: del 10,37 al 8,95%. En total, 850 votos menos.

No obstante, el gran derrotado de la noche, como casi en cualquier punto de España, fue Ciudadanos. La formación naranja perdió dos tercios de sus apoyos y, de amenazar la segunda plaza del Partido Popular hace seis meses, cayó a la quinta posición de manera contundente.

Ciudadanos terminó la noche electoral por debajo del 8% de los votos en la ciudad tras venir de rozar el 20%. Tan solo 2.717 zamoranos confiaron en José Antonio Bartolomé Cachón, que pagó muy cara la caída a nivel nacional y que, como muchos de sus compañeros en el hemiciclo, deberá abandonar ahora la cámara.

En cuanto al resto de los partidos, todos se ubicaron por debajo del 1% de los apoyos en Zamora capital, y tan solo tres consiguieron pasar de los cien votos. Fue el caso, por este orden, de Pacma y de los dos leonesistas, UPL y Prepal.

En definitiva, el escrutinio en Zamora capital colaboró con el crecimiento del PSOE, pero resultó insuficiente para que los socialistas conservaran su posición como primera fuerza. El resto de los partidos se situó, más o menos, en los números obtenidos en el medio rural.