En un partido de fútbol, cuando uno de los titulares no puede jugar, sale un suplente. Pero un suplente del mismo deporte, no de la sección de baloncesto. Los titulares Mariano Rajoy, Pedro Sánchez, Pablo Iglesias y Albert Rivera han decidido no dignarse a pisar la provincia durante la campaña electoral. No me sorprende. Entre "es el alcalde el que quiere que sean los vecinos el alcalde" de Benavente y la infructuosa "remontada" de Villaralbo, Zamora debe de ser el Vietnam de los grandes líderes.

Pero si Morata se lesiona, sale Aduriz. Nunca Pau Gasol. Rajoy e Iglesias salieron lesionados de Zamora el pasado mes de diciembre. Y como eso les impide jugar el partido en estas elecciones, nos han mandado a sus Pau Gasol particulares. Nada más y nada menos que Juan Vicente Herrera y Pablo Fernández. Que, junto a Luis Tudanca, completan el trío del "¿Qué pintan estos aquí y ahora?".

Estos tres artistas, que se baten el cobre a diario en las Cortes de Castilla y León, han sido los elegidos por sus partidos para movilizar el voto zamorano en las elecciones. Unas elecciones a las que no se presentan y que sirven para elegir los escaños de un parlamento que nunca han pisado. Casi nada.

Sorprendió al país que en diciembre Podemos eligiera Zamora. ¡No! Un pueblo de Zamora como inicio de campaña electoral. Sorprendieron las visitas de Pedro Sánchez a Sanabria y San José Obrero. Sorprendió Mariano Rajoy en Benavente y, tras las elecciones, en la capital. Y sorprendió Albert Riv? Perdón. ¿Por qué vienen todos estos? Se preguntaban los suspicaces electores zamoranos. ¿Qué quieren? ¿Qué tiene ahora esta provincia que les interesa tanto? No se angustien. Ya pasó. A día de hoy, Zamora vuelve a tener la condición de granero (otro gran suplente) de votos que permite diseñar para la provincia una campaña de tercera.