El Balonmano Zamora se impuso en el vigésimo Memorial Manuel Camba por 31-30 al UBU San Pablo en un apasionante e igualado partido que hizo vibrar a la afición. Un duelo jugado de poder a poder en el que quedó claro que los pistacho podrán plantar cara a cualquier conjunto este año, incluyendo a los favoritos al ascenso como era el caso.

Con gran atención a las defensas y un gol por equipo arrancó el partido sobre la pista del Ángel Nieto. Un choque con un muy equilibrado y marcado por las alternancias en el marcador. UBU San Pablo puso el primer tanto, los “Guerreros de Viriato" respondieron por medio de Cubillas y Bono, y los cidianos volvieron a tomar el control pocos minutos después (2-3, m. 6).

Con los visitantes llevando la delantera en el electrónico, comenzó sobre la pista un intercambio de goles en los que el público pudo disfrutar de grandes acciones de ambas primeras líneas. Un pulso que acabó por resolverse en favor del UBU San Pablo superado el minuto diez de partido, cuando los de Nacho González firmaron un parcial de 0-3 que ponía en el luminoso la primera diferencia importante del encuentro (5-8, m. 12).

El golpe asestado por los burgaleses hirió la moral de un Balonmano Zamora que no vaciló a la hora de reaccionar. Esta vez de la mano de Diego y Aravena, igualando el encuentro con un 3-0 que daba paso a nuevos minutos de igualdad y reparto de goles en las dos porterías (9-9, m. 17).

El partido continuó por los mismos derroteros en el tramo final del primer acto. UBU San Pablo dominó en los primeros compases pero, con Illesca anotando al contragolpe, Balonmano Zamora tomó la delantera con dos goles de renta a su favor (13-11, m. 22). Una diferencia que se llegó a ampliar en los siguientes minutos pero que, con la exclusión de Raúl Maide, se evaporó para terminarse la primera parte 17-16. Un tanteo fruto de las buenas paradas de Iván y de la primera superioridad numérica local.

Con jugadas rápidas e intercambio de golpes arrancó la contienda tras el paso por vestuarios. Un toma y dacá en el que, con mayor puntería que el Balonmano Zamora, UBU San Pablo conseguía remontar dos tantos de diferencia y reiniciar el partido a falta de 25 minutos para el final.

Con igualdad en el tanteo, los visitantes intensificaron su defensa. Eso los llevó a jugar en inferioridad durante un par de minutos, pero también a impedir que la calidad zamorana. Un talento que, sin embargo, sí obtuvo rédito con todos los jugadores en pista durante los siguientes minutos (23-21, m. 41).

La entrada de Mendieta pareció frenar la anotación de los cidianos, mucho más incisivos en el pivote. Y si bien el Balonmano Zamora no pudo correr en demasía pese a sus paradas, encontraba siempre la forma de seguir llevando la delantera en el tanteo. Una diferencia que se mantuvo en dos goles pese a que, tanto locales como visitantes, tuvieron que lidiar con dos minutos de inferioridad. Al menos hasta la recta final del encuentro (28-26, m. 50).

El desenlace de la contienda resultó apasionante pues, durante los primeros cinco minutos, UBU San Pablo igualó el marcador durante los mejores minutos de las defensas y porteros en pista. Unas tablas (28-28) que el Balonmano Zamora rompió con un parcial de 2-0 al que los visitantes trataron de reaccionar aprovechando una injusta exclusión a Guille. Una acción que no alteró los planes pistacho pues, con Mendieta brillante bajo palos y Cubillas sumando su séptimo tanto, la ventaja seguía siendo local. Y, al final, aunque la ventaja acabara siendo de un tanto, el trofeo quedó en manos de los “Guerreros de Viriato” (31-30).