El deporte está en jaque, y el zamorano no es ajeno a ello. En el mundo del baloncesto los aplazamientos de encuentros por la aparición de casos de COVID son una constante, que afectan a los representantes de la provincia. Primero fue el CB Zamora Enamora, en LEB Plata, el que se vio obligado a aplazar su encuentro por cuatro casos en la plantilla rival, Clavijo, y ayer se vivió un caso parecido en la Liga Challenge. El Recoletas Zamora tenía todo preparado para iniciar ayer su desplazamiento hasta Estepona, donde hoy debía jugar su encuentro liguero. Sin embargo, una llamada les puso sobre aviso y decidieron no salir a primera hora de la mañana. Así, antes de comer la Federación Española les confirmaba el aplazamiento de su choque tras detectar cuatro positivos en el cuadro malagueño, además de otras jugadoras con síntomas. Esta situación ya era algo que el entrenador naranja, Jacinto Carbajal, preveía que podía pasar y es que la situación es más que complicada. Cierto es que por ahora en el CD Zamarat todas han dado negativo en los test, aunque se someterán a pruebas periódicas para controlar la situación. Dado el panorama, el equipo se entrenó ayer y también lo hará hoy para no perder forma, y ya piensan en su próximo encuentro, si es que puede celebrarse.