La Regata Internacional de Sanabria retomó ayer su actividad tras un año de ausencia con una edición marcada por la situación sanitaria en la que el piragüismo zamorano volvió a exhibir músculo, si bien no lo hizo de forma tan abrumadora como en otras ocasiones. Una vez más, Eva Barrios fue el nombre propio en territorio sanabrés, ganando tanto de forma individual como con los colores del combinado español, sumándose a su gran actuación otras como la su compañero en Durius Kayak, Ricardo Rodríguez, y las de multitud de palistas cuyos podios auparon a Actividades Deportivas Zamora a ser campeón por equipos, con el Ciudad de Zamora subiendo al tercer cajón del podio en la categoría de jóvenes promesas.
Las modificaciones y el protocolo obligados por la pandemia se dejaron notar desde el primer minuto. Menos deportistas, ausencia de público y zonas acotadas en una Playa de la Viquiella que, sin embargo, no evitó registrar el típico colapso previo a la competición que llevó a que el inicio de la cita se retrasara un poco.
Con todo, gracias a la excelente organización, la presente edición avanzó de forma rápida y no tardó en recuperarse el paso dando gran dinamismo a la jornada. Y es que, apenas hubo parones entre regata y regata hasta llegar a la clásica entrega de premios con la que se puso colofón a este singular evento.
La Regata Internacional abrió, como suele ser costumbre, con la disputa entre clubes. En esta ocasión, entre palistas de entidades de Castilla y León, que midieron fuerzas en K-1, K-2, C-1 y C-2. Una lucha que deparó numerosos éxitos para los locales, que sacaron músculo.
En K-1, Durius Kayak llevó la voz cantante, con Eva Barrios dominando la categoría femenina en los 4.000 metros y Ricardo Rodríguez haciendo lo propio en la distancia masculina. Dos triunfos a los que se sumaron también los de los Sub-23 Jesica Rodríguez (ADZ) y Juan García (Ciudad de Zamora); el firmado por la dupla compuesta por los sénior Luis Álvarez y Óscar Borrego (ADZ); el triunfo del canoísta sénior José Carlos Ramos (ADZ); la victoria de Raúl Coco (ADZ) en juveniles, categoría en la que también se impusieron Spas Dimitrov y Sergio Pereda (ADZ) o el oro de Carrero e Illán (Ciudad de Zamora) en el K-2 mixto.
Tras la gran puesta en escena por parte del piragüismo local, las aguas de Sanabria acogieron la disputa del Gran Premio Internacional, principal atractivo de la jornada con la presencia de los K-4 de las diferentes selecciones autonómicas y los cuartetos internacionales. Una segunda parte de la competición que acabó con un resultado poco habitual, pues España y Dinamarca tuvieron que repartirse la victoria en la disputa por países.
Si bien Eva Barrios y el resto del equipo femenino (compuesto también por Arantza Toledo, Irati Osa y Tania Álvarez) no falló, conquistando el oro por delante de los barcos de Dinamarca y Hungría, el conjunto masculino notó mucho más sus ausencias. La embarcación de Llorens, Plaza, Fernández y Becerro se empleó a fondo, pero tuvo que conformarse con el segundo puesto por detrás de los palistas daneses. Un resultado que llevó a las banderas de España y Dinamarca a ondear juntas en lo alto del mástil al final de la entrega de premios.
Una ceremonia que tuvo en Asturias a su otro gran protagonista, ya que sus combinados se impusieron en la disputa de los K-4 por selecciones autonómicas. Una doble victoria con suspense pues, si bien en categoría femenina vencieron con solvencia dejando a Castilla y León en tercer puesto, en categoría masculina su primer puesto llegó tras una penalización de 30 segundos a Castilla y León, pasando los locales del oro a estar fuera del podio.
Un cajón que coparon el K-4 masculino de AD Zamora y el femenino del Ciudad de Zamora en la última de las regatas que puso fin a la fiesta de las piraguas en su regreso a Sanabria.
