El Caja Rural Virgen de Zamora no pudo alargar la buena racha iniciada días atrás ante el Nissan Santiago y cayó derrotado en casa frente al líder del Grupo AB, un USAL La Antigua que no desperdició la oportunidad de resarcirse de su último tropiezo en el Manuel Camba.

La contienda, aplazada en su día, enfrentaba a dos equipos en situaciones opuestas. Los zamoranos, en la zona baja de la tabla, acudían con buenas sensaciones tras una victoria; los salmantinos, al frente de la clasificación, venían de caer ante La Flecha. Un contraste que dejaba intuir la posibilidad de disfrutar de un choque igualado. Sin embargo, los visitantes no dieron lugar a que un guion equilibrado reinara a lo largo del partido.

Pese a las buenas intenciones del bloque de Vicente González, que entró en el partido centrado y consciente de sus puntos fuertes, el líder exhibió su poderío desde el inicio. Tanto en el interior, donde con más centímetros era capaz de anotar y dominar el rebote, como en un perímetro desde donde encontró soluciones a las mejores defensas zamoranas en el momento clave.

Con este guion, el Caja Rural de Zamora tenía difícil seguir el paso a su adversario. Ya al final del primer cuarto, la diferencia en el marcador era notable (11-24) pero lo fue más al descanso. Y es que, lejos de rebajar su intensidad defensiva, USAL La Antigua siguió tratando de asfixiar la circulación de balón local con una pegajosa puesta en escena ante su aro. Un entramado que hizo perder varios balones al plantel zamorano y dificultó mucho que encontrara buenas posiciones de tiro, lo que se tradujo en un contundente 23-45 al paso por vestuarios.

Deus bota el balón entre sus piernas ante dos defensores charros. | J. L. F.

Con más de veinte puntos de diferencia en contra, el Caja Rural de Zamora no bajó los brazos. Regresó al partido dispuesto a plantar batalla y, como hiciera en los últimos minutos de la primera parte, consiguió por momentos dar mucho sentido a su juego, gozando de fluidez y bajando de pulsaciones el envite. Sin embargo, anotar siguió en el debe zamorano y la USAL lo aprovechó para incrementar un poco más la renta. El líder no bajó el ritmo y, con el mismo acierto que en anteriores periodos, sentenció el choque antes del desenlace (32-66).

Con todo decidido, los equipos encararon el último cuarto sin tensión. El Caja Rural de Zamora buscó en el tramo final mejorar sus prestaciones y ganar sensaciones, logrando por momentos buenas acciones ante un rival de envergadura que, en los últimos minutos, dosificó esfuerzos permitiendo que el cuadro local maquillara el tanteo hasta el definitivo 55-78.