Después de más de tres meses de competición el caso del Real Burgos sigue sin resolverse. Tanto es así que la situación contra la Federación de Castilla y León de Fútbol se recrudece y es que, tal y como informó ayer el club burgalés, el juzgado número 5 de Valladolid ha enviado un nuevo requerimiento a la Territorial para que en un plazo "no superior a siete días" cumpla con la medida cautelar dictaminada e incluya al Real Burgos en el Grupo VIII de la Tercera División.

Asimismo, al parecer, se ha desestimado la propuesta de la Federación regional de que el caso se derivase Civil al Contencioso-Administrativo, y recuerdan desde el Real Burgos que el incumplimiento de este requerimiento podría incurrir en un "delito contra la Administración de Justicia y desobediencia a la Autoridad Judicial".

La postura de la Federación de Castilla y León presidida por Marcelino Maté no ha variado y ya han remitido toda la información y documentación la Federación Española de Fútbol, así como una nueva petición (ya lo hicieron hace meses) para que readmitan al Real Burgos, puesto que la RFEF dejó claro que la competencia de la Tercera es suya.