El MMT Seguros firmó con el líder, FC Barcelona B, un justo empate a 27 goles en un duelo tremendamente igualado en el que la plantilla pistacho hizo frente a los numerosos problemas que fueron aconteciendo, como la lesión de Fernando o la descalificación de Adrián Prieto, para acabar llegando a los minutos finales con opciones de ganar una contienda que pudo caer del lado blaugrana en los últimos segundos.

Con los dos equipos aplicándose al máximo en defensa arrancó la contienda en el Ángel Nieto. Los locales, vigilando los balones filtrados al pivote, abrían el marcador con un gol de Ramiro a los dos minutos de juego; mientras que el FC Barcelona B, anotaba con un tiro exterior. Eran los dos primeros aciertos de dos equipos con estilos diferentes que intercambiaron golpes durante los primeros compases buscando analizar las debilidades de su adversario.

El MMT Seguros sufría para poder superar la envergadura de la línea defensiva blaugrana, mientras que el bloque visitante tomaba ventaja gracias al buen hacer de sus laterales cuya potencia en el lanzamiento resultaba insasequible para Barrientos. Un arma que daba menos valor a las dianas de Ceballos desde los siete metros o las buenas acciones tanto de Adrián Prieto como de Abalós, ya que solo permitían al cuadro pistacho no perder la estela de su rival (4-7, m. 10). Ni la llegada de la primera exclusión blaugrana pudo alterar el guión del envite, principalmente porque poco después fue Abalós quien se fue al banco dos minutos. La situación, claramente compleja, forzaba a Leo Álvarez a pedir un tiempo muerto en busca de respuestas tanto ofensivas como defensivas para los suyos.

Regresó a la pista el cuadro de Viriato sin cambios más allá de la entrada de un Posado. El meta intervino con acierto en las dos primeras acometidas del FC Barcelona B pero no hubo acierto en ataque para dar continuidad a una tímida reacción que puso en apuros la lesión de Fernando al hacerse daño en una de sus manos. Los goles del MMT Seguros llegaban a cuentagotas y eso impedía retomar el mando a los de Leo Álvarez pese al buen hacer de la segunda unidad y las primeras dianas de Octavio en el envite antes del desenlace del primer acto (11-12, m. 21).

Los minutos previos al descanso fueron vibrantes, con un Luis Posado espectacular bajo palos cuando el equipo más lo necesitaba. Eso sí, el MMT Seguros seguía con problemas pues Dalmau recibía un golpe en la cara (estando fuera de pista un buen rato para volver con una aparatosa cura) y Ramiro era excluído. Inconvenientes que impedían a los zamoranos lograr un empate que mereció durante muchos minutos y que acabó produciéndose en un siete metros transformado por Ceballos a treinta segundos del término del primer acto. Un 13-13 que deshizo el FC Barcelona B en el último segundo para irse a vestuarios por delante en el marcador.

A velocidad de vértigo arrancó la segunda parte con ambos equipos enlazando sin éxito ataques rápidos durante los dos primeros minutos hasta que Jaime, de vaselina, anotaba el 14-14. Un gol al que siguió la polémica descalificación de Adrián Prieto, por roja directa, en un lance que no mereció tal castigo y que dejaba con uno menos a los locales. Aún así, el MMT Seguros no le perdía el pulso al partido. Incluso cuando el arbitraje cláramente le perjudicaba a la hora de cortar acciones de ataque con finalizaciones claras. Su ímpetu, y los goles de Raúl Maide y Dalmau, llevó a los zamoranos a ponerse por delante en el marcador (18-17, m. 29). Una ventaja circunstancial que rápidamente el Barcelona fue capaz de contrarrestar con un parcial de 0-4 fruto de varios errores ofensivos del plantel de un Leo Álvarez obligado a parar el partido.

Con tres goles de desentaja y 18 minutos por delante, el MMT Seguros no perdió la calma. Álvarez siguió rotando su banquillo buscando mantener un alto desempeño de los suyos sobre la pista. Regresó Barrientos, Petter tomó plaza en el poste y los extremos también alternaron. Y la estrategia parecía tener resultados pero, como ocurriera en el primer acto, cada oportunidad para igualar la contienda se desvanecía por el acierto del meta rival o los fallos propios. Incluso la madera estaba en contra de la formación pistacho como en un siete metros de Octavio que repelió el larguero. Obstáculos y más obstáculos en un duelo disputado de poder a poder para Leo Álvarez y los suyos que, aún así, encararon la recta final con empate en el marcador tras un gol increíble de campo a campo del meta Barrientos (2-2, m. 50).

El tramo decisivo del encuentro mantuvo la pauta establecida durante el resto del choque. Igualdad máxima, tensión y jugadas convertidas en aciertos o errores por mínimos detalles. Un guión en el que los zamoranos consiguieron ponerse por delante con un gol de Petter desde los siete metros, posición de privilegio que pudo mantener hasta los últimos cinco minutos si bien nunca pudo acabar de romper el envite. La máxima en favor de los de Viriato la puso Ceballos, desde el extremo, con el 26-24 al que no pudo sumar un tercer gol en varias ocasiones. Una diferencia de dos tantos que, en los últimos tres minutos, se evaporó gracias a las buenas acciones del meta catalán dejando a falta de 20 segundos un inquietante 27-27 con bola para los locales. Oportunidad que Leo Álvarez trató de aprovechar solicitando tiempo muerto para preparar una última jugada que no llegó a buen término teniendo que salvar el punto a repartir en el último segundo abortando la contra visitante.