La directiva del Zamora CF busca desesperadamente soluciones que den oxígeno a su maltrecha económica y que permitan al club tener futuro.

Por este motivo ayer convocaron a los últimos expresidentes que ha tenido la entidad, con el objetivo de pedirles ayuda para afrontar el ‘Caso Puma’ y el resto de la deuda, y es que los números rojos podrían rondar los 300.000 euros a final de temporada.

Así, al encuentro de ayer acudieron José María Casas, Isaac Marcías y Segismundo Ferrero, además de Jesús Turiño, directivo de Ferrero, mientras que Maxi Martín se disculpó por no poder acudir.

Durante la reunión, los actuales responsables expusieron la situación financiera y pidieron ayuda a los exmandatarios dejando claro que “si nosotros nos tenemos que ir, nos iremos”.

De hecho, fuentes de la actual junta directiva explicaron a este periódico que “les pedimos que nos ayudaran a unir a gente que tenga capacidad económica y entendemos que si vienen personas y ponen su dinero querrán gestionarlo”. “Lo que queremos es zanjar la deuda con Puma y con otros proveedores para arrancar, si es posible, la próxima campaña con estabilidad. Lo que importa es el club”.

Con esta situación, la conclusión que sacaron los presentes es la necesidad de hacer una reunión con presencia de responsables de las instituciones, patrocinadores, empresarios y responsables de la actual directiva, y anteriores, un único encuentro del que sí pueda salir unas directrices claras que luego tendrán que exponer a los socios.

Por este motivo, y como aún no hay fecha para este encuentro, es posible que se anuncie un aplazamiento de la asamblea de socios prevista para el próximo lunes 14 de mayo, aunque este extremo no está confirmado y habrá que ver cómo avanza la semana.

Hoy, de hecho, la reunión de la directiva será con patrocinadores pero lo que quieren es un encuentro con “todos los sectores que puedan echar una mano” y para eso todavía no hay fecha.