El colegiado zamorano Óscar Alonso Merino denunció haber sufrido agresiones tras el encuentro entre el Peñaranda y el Huracán Z. Según parece, enfurecidos por su actuación, varias decenas de aficionados salmantinos se lanzaron sobre él y llegaron incluso a agredirle.

En el acta redactada, se puede leer que «cuando nos dirigíamos al vestuario, aproximadamente 150 personas se abalanzaron hacia nosotros con intención de agredirnos, consiguiendo dos personas, que no pudieron ser identificadas, propinar una patada en la pierna derecha y fuertes empujones en el pecho y en la espalda del árbitro».

El colegiado precisó, según se lee en el blog «El árbitro de fútbol», que las agresiones no causaron lesiones aparentes, pero sí un fuerte dolor en la pierna derecha. El trencilla mostró su agradecimiento por la actitud del Peñaranda: «El delegado de campo, Carlos Marcos Herrero, nos ayudó en todo lo posible».