Manzanal abre las fiestas albarinas

Tras cinco días de procesiones matutinas, tardes de toros y verbenas, el broche de oro ha sido la marcha solidaria y un cocido

Paseo campestre contra a favor de Azaica (Asociación Zamorana de Ayuda Contra el Cáncer). | Chany Sebastián

Paseo campestre contra a favor de Azaica (Asociación Zamorana de Ayuda Contra el Cáncer). | Chany Sebastián / Chany Sebastián

Manzanal del Barco ponía el broche de oro a sus fiestas patronales en honor a San Isidro y San Torcuato, –primeras del año en la Tierra de Alba–, que han contado con un amplio y variado programa de actos que durante cinco intensas jornadas han cautivado a niños, jóvenes y mayores, a vecinos, emigrantes y forasteros.

Domingo solidario con un paseo campestre a favor de Azaica (Asociación Zamorana de Ayuda Contra el Cáncer) en colaboración con el Ayuntamiento de Manzanal del Barco y la Fundación Caja Rural de Zamora, con un donativo de 10 euros que incluía la comida. Finalizada la marcha de senderismo hubo una comida de hermandad y de convivencia donde los participantes disfrutaron de un cocido de garbanzos con boletus.

Misa en honor a San Isidro Labrador. | Ch. S.

Misa en honor a San Isidro Labrador. | Ch. S. / Chany Sebastián

Como colofón a los festejos al llegar la anochecida se programó un cierre de fiestas mágico con un concierto a orillas del embalse de Ricobayo a cargo de Diego Turrión un joven pianista zamorano, nacido en 2003, que a los nueve años entro en el conservatorio Profesional de Música de Zamora donde culminó su formación en 2022.

Los actos religiosos volvieron a estar presentes con dos santas misas y sus correspondientes procesiones, un día dedicado a San Isidro y otro con San Torcuato, oficiadas ambas por el párroco de la Unidad de Acción Pastoral de Carbajales y actual arcipreste de Aliste y Alba Ángel Carretero Martín. Mayo es un mes de tiempo cambiante y aun en plena primavera este año se optó por instalar una gran carpa en la Plaza Mayor que permitió a los manzanalinos poder participar y seguir los actos al aire libre protegidos del frío y la lluvia: "Ha sido un acierto"· aseveran los vecinos.

Verbena. | Ch. S,

Verbena. | Ch. S, / Chany Sebastián

Manzanal del Barco lleva muchos años siendo uno de los pueblos de la comarca natural de Aliste, Tábara y Alba por donde pasan las mejores orquestas del panorama nacional para amenizar los bailes nocturnos. Este año se contó con la orquesta "La Reyna Show" de Burgos el viernes y la macrodiscoteca "Show Tokio" con la particularidad de que las actuaciones dieron comienzo al anochecer con lo cual también pudieron disfrutar de ellas las personas más mayores.

Y vaya si disfrutaron: Paqui, la "abuela molona", a sus ochenta años, no dudo en subir al escenario móvil y participar con los propios músicos, cantantes y bailarines en animar el cotarro.

Festejo taurino en las fiestas de Manzanal del Barco. | Ch. S.

Festejo taurino en las fiestas de Manzanal del Barco. | Ch. S. / Chany Sebastián

A parte se desarrollaron varios conciertos, alguno de tarde, como el de canción´ española con África Herrero. Ya por la noche hubo otros dos conciertos con Betty Lu y José Luis Peñas. El folclore corrió a cargo de "Los Chirlos" y también se contó con un espectáculo de sevillanas a cargo del grupo Añoranza. Los festejos taurinos son cada año otro de los grandes protagonistas y en esta ocasión los aficionados locales y foráneos disfrutaron de la suelta de vaquillas y un novillo de la ganadería de los Hermanos Bragado de Fuentespreadas. El sábado se soltó un toro de cajón.

Manzanal es una localidad al que su apellido "del Barco" delata su importancia histórica pues, asentada a orillas del Esla, su barca le convirtió en zona de paso obligado, junto a la de San Vicente del Barco, para cruzar el gran río, entre Castilla y Galicia: los segadores del cantar de Rosalía de Castro que bajaban en verano, también los canteros y galocheros; y los peregrinos que procedentes de Andalucía seguían por Aliste camino de la catedral de Santiago de Compostela.

Procesión por las calles de Manzanal del Barco. | Ch. S.

Procesión por las calles de Manzanal del Barco. | Ch. S. / Chany Sebastián

Ya era un pueblo importante a finales del siglo XIX y así lo atestiguan el primer censo del siglo XX donde se le asignaban 526 residentes una auténtica barbaridad en comparación con la mayoría de los 102 pueblos alistanos, tabareses y albarinos de la época.

La primera mitad del siglo pasado gozo de muy buena salud poblacional casi siempre al alza: en la primera década subió 100 vecinos (hasta 626) y aguantó con 632 en 1930. Durante la Segunda República y la Guerra Civil creció ligeramente hasta los 649 habitantes de 1940: su época de mayor esplendor poblacional. La posguerra trajo consigo el éxodo rural y en 1950 ya se había bajado a 558 y en 1970 a 435 (-122).

En los años setenta Manzanal perdía 139 más y bajaba a 275. En la actualidad cuenta con 127 empadronados de los cuales 65 son varones y 62 son mujeres. De los allí nacidos, vivos, 32 residen en el extranjero. Cuenta con 7 menores de quince años y en el polo opuesto 62 personas son de la tercera edad (36 octogenarios y nonagenarios).

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