Últimos datos oficiales de EHE en Zamora: 30 vacas muertas y 270 enfermas

La Junta apunta que la tasa de mortalidad es del 1,5%

Vacas en una explotación

Vacas en una explotación / I. G.

30 vacas muertas y 270 enfermas. Son últimos datos oficiales de la Junta de Castilla y León sobre el impacto de la Enfermedad Hemorrágica Epizoótica (EHE) en la provincia de Zamora.

Tras el estudio y depuración de los datos procedentes de explotaciones que recientemente han comunicado que tienen animales con síntomas claros.

Actualmente están ya estudiadas y depuradas los datos correspondientes a 14 explotaciones, que tienen un censo total de 2.016 vacas. De los mismos se concluye que 270 vacas de estas explotaciones tienen síntomas de la enfermedad, lo que supone una tasa de morbilidad (animales enfermos) del 13 %. Y 30 vacas han muerto, lo que supone una tasa de mortalidad del 1,5 %.

La Delegación Territorial de la Junta apunta que "los servicios oficiales veterinarios siguen trabajando, y en los próximos días esperamos disponer de datos que correspondan a un mayor número de explotaciones, de los que se podrán educir datos epidemiológicos cada vez más fiables".

Esta enfermedad no supone problema en el movimiento o consumo de los productos animales, de modo que se puede consumir o comerciar con su carne, leche o piel sin que suponga ningún menoscabo a la excelente calidad de los productos derivados del ganado vacuno en Zamora. 

Por su parte, el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación en funciones, Luis Planas, convocará, en las próximas dos semanas, a las comunidades autónomas, así como a las organizaciones profesionales agrarias y del sector ganadero para avanzar en el seguimiento y control de las enfermedades animales, en coordinación, según matizó, con la Unión Europea y la Organización Internacional de Sanidad Animal.

Así lo anunció este viernes el ministro durante su discurso en la inauguración de Salamaq 2023, la feria del sector agropecuario que se celebra desde hoy hasta el martes en Salamanca. Planas señaló, además, que ante la aparición de enfermedades que afectan a la cabaña ganadera, resulta necesario “coordinar y unir esfuerzos” entre las administraciones públicas y el sector para “responder a estas situaciones”.