Petisqueira y Villarino recuperan el "puente del milagro" en la "Raya" alistana

La "Raya" de España (comarca de Aliste) y Portugal (región de Tras os Montes y Alto Douro) han recuperado el peculiar "Puente del Milagro".

Se trata del único paso fronterizo en la Unión Europea, que, situado entre dos países, está autorizado por los organismos internacionales, para poder prestar servicio solamente uno de los 365 días del año: el domingo más cercano al día 30 de mayo.

"Devoción y mercado volverán a romper fronteras en la romería"

El puente se sitúa en el paraje de "El Tablao" y dentro de dos espacios naturales: la alistana Reserva Regional de Caza Sierra de la Culebra y el Parque Natural de Montesinho, dentro de la "Raya Húmeda", donde las aguas internacionales del río Manzanas marcan la frontera. Más concretamente, junto en la Marra 437 del límite fronterizo de España y Portugal.

Su único cometido es facilitar que en plena raya y sobre dichas aguas internacionales hispanolusas el encuentro mariano de la romería mariana en honor a la Virgen de Fátima que este año se celebrará el próximo domingo.

La peculiar historia comenzó, por casualidad y causalidad, en 1985 cuando los vecinos de Villarino y Petisqueira decidieron hacer la bendición de campos de mayo conjuntamente en la Cruz de las Majadas (lado español). Solo había un pequeño problema, había que cruzar el río Manzanas y no había puente.

En estas fechas el río Manzanas suele traer un caudal a la baja camino del verano y vadearlo no fue un impedimento. Eso sí, la procesión tuvo que cruzarlo cada uno como pudo. Los feligreses de uno en uno por los pontones (fila de piedras) puestas sobre el cauce. Mas difícil lo tenían los portadores pues al ser cuatro y llevar a la imagen en andas era más que difícil era imposible. La solución paso por descalzarse y cruzamos "a trocho mocho".

En 1986 se decidió crear y poner en marcha la romería de la Virgen de Fátima y hacerlo justo en la frontera "para ser todos iguales: vamos que, sobre las propias aguas internacionales".

Fue así como se barajó un plan para eludir las prohibiciones internacionales en materia de cauces fluviales. Una tarde de primavera, nadie sabe por qué, –es un decir–, apareció en la ribera española un camión de arena (grava), junto con varios tubos de hormigón y doce sacos de cemento. A la mañana siguiente "milagrosamente" aparecía construido un arcaico paso al que se llamó "Puente de Milagro", aunque todos sabían que en él más había tenido que ver la picaresca, esfuerzo y voluntad humana que la acción divina. El puente cumplió su cometido muchos años.

El plan había sido urdido por los vecinos de ambos pueblos una tarde mientras cuidaban sus vacas y ovejas en la ribera de las manzanas. Los alistanos se encargaban de llevar los materiales y los lusos de construir el puente durante la noche. Dicho y hecho.

Bien es cierto que se contó con la complicidad necesaria del entonces alcalde de Figueruela de Arriba José Luis Estévez Pérez (nacido el día 27 de julio de 1931 y fallecido el 29 de agosto de 2021), muy devoto también de la Virgen de Fátima.

Una vez construido el nuevo acceso entre Villarino de Manzanas y Petisqueira, la autorización de su puente para cruzar el río Manzanas llevaba incluida la demolición del viejo "Puente del Milagro" con 28 años de vida.

El Ayuntamiento de Figueruela de Arriba, a propuesta de su alcalde Carlos Pérez Domínguez, fue el encargado de normalizar y legalizar la situación para cumplir con la legislación vigente ante la Comisaría de Aguas de la Confederación Hidrográfica del Duero. Dado que ya había un puente para la conexión viaria (obviamente no para celebraciones religiosas) había que buscar la alternativa para la romería. De esta manera los organismos internacionales autorizaban habilitar un puente móvil que solo prestaría servicio una vez al año.

El paso fronterizo romero de 2014 consta de dos partes diferentes. La primera de ellas son los dos estribos que fueron construidos con piedra y que es la parte que se mantiene fija y estable en la ribera todo el año.

La segunda es la pasarela móvil que está compuesta de dos grandes y pesadas piezas de hierro y madera con 3,5 metros de longitud y 1,75 metros de anchura cada una. Al ser tan pesadas es imposible colocarlas a mano, por lo cual se ha tenido que recurrir a contratar un camión grúa de una empresa de San Martín de Tábara, la cual deberá regresar el lunes para desmontarlo. Cuenta también con barandillas de protección movibles para evitar posibles caídas al río Manzanas.

El puente, justo en aguas internacionales, hará el domingo las veces de pasarela mariana y justo sobre ella se desarrollará el encuentro entre las procesiones de España y Portugal: venias entre las dos imágenes portadas por las mujeres y saludas entre las autoridades civiles y religiosas: alcaldes y curas, y entre los feligreses. Cumplido el ritual la comitiva de Villarino cede los honores a la de Petisqueira que procesionará en primer lugar hasta el santuario donde tendrá lugar la misa a las 13 horas

El puente sirve también en la romería para conexionar el mercado portugués situado a la derecha del río Manzanas y el español a la izquierda. En el año 2013, la Diputación de Zamora, a petición del Ayuntamiento de Figueruela de Arriba, afrontó aguas abajo, entre la ermita y la confluencia del Cabrón, la construcción de un majestuoso puente que sirvió para la conexión del nuevo acceso por carretera desde Villarino de Manzanas hasta Petisqueira.

La inversión económica ascendió a 284.941 euros, financiando la mayor parte de ellos la Unión Europea a través del Fondo Europeo de Desarrollo Regional).

La plataforma tiene un total de 9,60 metros: calzada de rodaje de dos carriles de 3 metros cada uno, más sendos arcenes de 50 centímetros y las dos aceras con ancho internacional de 1 metro y 30 centímetros. Tiene 45 metros de longitud. Fue construido por la empresa "Manuel del Río" de Espinosa de los Monteros (Burgos) fundada por un empresario zamorano natural de Fonfría.

La ribera del Manzanas está ya lista para la romería de Fátima.

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