Cobreros se suma a los municipios de Sanabria Baja que combaten con organismos de control biológico a la avispilla del castaño, Dryocosmus kuriphilus, junto con Robleda-Cervantes, Pedralba de la Pradería y Puebla de Sanabria. En este término municipal se han realizado entre 10 y 12 puntos de suelta de Torymus sinensis, otra avispilla que parasita las larvas de Dryocosmus, en plantaciones y ejemplares donde se ha detectado su presencia.

Vecinos del municipio participaron el pasado miércoles en la charla informativa sobre la sanidad del castaño, organizada por la Diputación dentro de la Mesa del Castaño y con la colaboración de la Junta . A la jornada formativa asistieron Berta Martín, ingeniero del Servicio de Agricultura de la Diputación; Pedro Mesonero, técnico de la Mesa del Castaño, y Rubén Díaz, técnico de la Sección de Defensa del Medio Natural de la Junta de Castilla y León.

Rubén Díaz precisó que en el caso del municipio de Cobreros la propagación de la avispilla del castaño es incipiente porque no se han detectado grandes superficies afectadas pero ya se han liberado avispas parasitoides que pones sus huevos en las agallas y se alimentan de la larva de la avispilla del castaño. En estos momentos, en otras zonas donde está más adelantada la lucha biológica, están apareciendo Torymus, en las mismas áreas de la avispilla.

Parasitoide

La avispilla pone sus huevos en las agallas del castaño y se alimenta de su savia provocando una disminución de la supervivencia foliar que supone una importante reducción de la producción del castaño, entre 80 y el 90%. En países como Italia llevan 20 años con este problema al tiempo que tienen El parasitoide que depreda la avispilla procede de Italia y son tratamientos costosos. De ahí que, a través de la administración, se haya coordinado la suelta de Torymus. Los puntos de suelta están señalizados y es necesario evitar el uso de insecticidas ni quemar los restos de poda más fino porque contienen al depredador.