La pintora Eva María Lobato ha convertido las redes sociales en una herramienta de trabajo imprescindible para dar a conocer su prolífica obra, que lejos de paralizarse durante la pandemia se ha ampliado con novedosos proyectos durante los últimos meses. Una de las últimas propuestas creativas de esta artista multidisciplinar, que reside en Rionegro del Puente, ha sido plasmar en un código QR el significado de su firma artística. Para ello, ha tenido que realizar un minucioso proceso para dividir un lienzo de un metro de alto por otro metro de ancho en 1.369 pequeños cuadrados.
“La idea se me ocurrió por la situación que estamos viviendo ahora, en la que no está permitido tocar, ni tocarse unos a otros. Estamos dirigidos un poco por lo que nos mandan y es cómo nos podemos sentir”, explica Eva María Lobato. El código QR también incorpora “una hormiguita para transmitir que las personas somos como una hormiga en un mundo lleno de códigos QR”. A la hora de expresar el mensaje que quiere transmitir con sus obras, la artista cuenta con la colaboración altruista del escritor valenciano Peter Queralt.
Uno de los fenómenos que ha generado la pandemia, según revela la pintora zamorana, “es la creación de una especie de cadena de favores, un yo te ayudo y tú me ayudas, lo que te permite colaborar y trabajar online con gente que no conoces en persona y que seguramente no conozcas en la vida”. Pone de ejemplo un proyecto de desnudos que está realizando con el fotógrafo Óscar Manuel Sánchez, en el que “todo el trabajo, incluso con las modelos, está siendo online”.
La esfera virtual no solo se ha convertido en su principal herramienta de trabajo, sino también en un escaparate global para dar a conocer sus obras. De hecho, algunos de sus cuadros solo se han expuesto en galerías virtuales, como un aplaudido retrato del actor Morgan Freeman, mostrado junto a las obras de pintura hiperrealista de otros 400 artistas.
Sobre el estilo con el que se identifica esta artista zamorana, confiesa que “hago de todo, desde paisajismo, figurativo, bodegones, aunque yo realmente en lo que soy especialista es en paisajes”. En todo caso, “voy buscando retos, mirando qué es lo que la gente no puede pintar para pintarlo yo. No por demostrar que lo hago mejor que los demás, sino para demostrármelo a mí misma, para superarme”.
Su próxima meta es construir un nuevo estudio de pintura en Rionegro del Puente para recopilar y dar a conocer las obras que ha realizado a lo largo de toda su trayectoria artística
