2021 será Año Santo Jacobeo, el primero en más de una década, y por eso Villalpando está remodelando el albergue de peregrinos municipal con el objetivo de ofrecer una mejor experiencia a los caminantes de todas las nacionalidades que eligen esta villa zamorana para descansar en su viaje a pie hasta Santiago de Compostela por el “Camino Matritense”.

La inversión ha sido posible gracias a la colaboración entre el Patronato de Turismo de la Diputación Provincial de Zamora, dirigido por Jesús María Prada Saavedra, y el Ayuntamiento de Villalpando, que preside Félix González Ares.

El municipio ha recibido una subvención del Patronato de Turismo que asciende a 6.769 euros para la reforma del albergue de peregrinos, a los que el Ayuntamiento de Villalpando ha decidido sumar otros 2.398 euros de fondos propios para abordar una reforma de mayor calado en el inmueble, ubicado en el bajo del antiguo edificio de las viviendas de los maestros, junto a la escuela pública “La Inmaculada”.

El ayuntamiento es el encargado de dirigir y ejecutar la reforma, y además gran parte de los trabajos están siendo realizados directamente por los propios operarios municipales, lo cual permite un gran ahorro en mano de obra para poder destinar una mayor proporción del presupuesto a la adquisición de materiales y mobiliario, según ha explicado a este diario el alcalde Félix González.

Un operario trabaja en la reforma del baño del albergue. | J. L. Fernández

La mayor parte de la inversión se ha destinado a la carpintería exterior, ya que se han renovado todas las ventanas de la vivienda destinada a albergue de peregrinos, por un importe total de 5.437 euros. Las nuevas ventanas son de climalit con puente térmico para mejorar el aislamiento del inmueble y que haya una buena temperatura en el interior al tiempo que se puede ahorrar en energía.

También se ha llevado a cabo una reforma completa del cuarto de baño, incluyendo la renovación de las tuberías y de los sanitarios, incluido el plato de ducha, así como la grifería, además del alicatado. El dinero invertido en esta instancia es de 2.473 euros.

Por último en la cocina se ha cambiado tanto la caldera como varios electrodomésticos para que presten servicio a los huéspedes del albergue, tales como el microondas, la nevera o la cocina, que antes funcionaba con butano y ahora será sustituida por una placa de vitrocerámica. En total se ha invertido algo más de 1.500 euros en la adquisición de estos nuevos elementos.

El albergue cuenta con tres dormitorios con camas completas para el descanso y mobiliario para guardar la ropa y enseres personales de los visitantes. Por esos motivos este es uno de los lugares de descanso más apreciados por los peregrinos que optan por recorrer el Camino Matritense. Esta ruta jacobea es una ruta secular utilizada ya en tiempos de los romanos, pues hasta llegar a esta villa terracampina coincide con la calzada de Astorga a Zaragoza por Cantabria. Posteriormente sería el camino que tomaban los arrieros maragatos hacia la capital de España y cañada trashumante de La Coruña a Madrid. Procede de Tordesillas y entra en la provincia de Zamora por el término de Cotanes del Monte, hasta llegar a Villalpando, la población de mayor tamaño de la zona. Tras la villa continúa su recorrido por los términos de Cerecinos de Campos y San Esteban del Molar hacia Benavente, sorteando el Esla por el puente de piedra de los Paradores de Castrogonzalo.

Una de las nuevas ventanas en un dormitorio del albergue. | J. L. Fernández

Una vez en esta ciudad, los peregrinos pueden optar por continuar su camino hacia Compostela por la Ruta de la Plata hacia Astorga, o seguir avanzando por el valle del Tera o el de Vidriales hacia tierras sanabresas.

Aunque esta no es por el momento una de las rutas jacobeas más populares ni transitadas, en los últimos años han pasado por el albergue de Villalpando peregrinos de muy distintas nacionalidades europeas, excepto en el 2020.

Este año el servicio ha permanecido cerrado desde el mes de marzo con motivo de la pandemia de COVID-19. Ni siquiera reabrió durante el verano, una vez terminado el primer estado de alarma, ya que el Gobierno Local de Villalpando optó por mantener el albergue cerrado “por prudencia”. En estos momentos tampoco se pueden ocupar sus plazas debido a las obras que se están llevando a cabo en el edificio.

Por ese motivo, el deseo de los responsables del Ayuntamiento de Villalpando es “que la situación sanitaria mejore en Castilla y León y en el resto de España a lo largo de 2021 para poder volver a abrir el albergue y que los peregrinos puedan estrenar las nuevas instalaciones mejoradas a lo largo del próximo Año Jacobeo, pero solo si las autoridades lo permiten y si esta actividad no pone en peligro la seguridad y la salud de los vecinos de la villa”, en palabras del alcalde, Félix González.