En la provincia más envejecida de España (Zamora) no es poco habitual que los pueblos dediquen una parte de los escasos recursos municipales a la construcción de velatorios donde dar a sus fallecidos una despedida digna, cerca de sus hogares, cada vez que un vecino resta una cifra al padrón municipal, casi siempre menguante. Lo raro es que un pueblo decida abrir una guardería, que es lo que va a hacer Arcenillas.

Este ayuntamiento, como tantos otros, se planteó hace un tiempo la construcción de un tanatorio en el municipio, pero una serie de nacimientos acontecidos últimamente les llevó a estudiar la idea de dedicar esos recursos a las familias con niños. El alcalde de Arcenillas, Enrique Rodríguez García (Ahora Decide), explica que el ayuntamiento llevó a cabo una encuesta entre las familias jóvenes de la localidad y confirmó que existía demanda suficiente para un servicio de guardería, que prevén que sea utilizado en el primer curso por 13 niños de Arcenillas y de otros municipios cercanos como Casaseca de las Chanas, Gema y Peleas de Abajo.

Para ello, el ayuntamiento pretende reformar una vivienda de titularidad municipal que actualmente está desocupada, y que era precisamente el espacio que tenían reservado para el velatorio. Se trata de un inmueble de 85 metros cuadrados ubicado junto al puesto de la Guardia Civil y junto a la escuela de Arcenillas –del CRA de Moraleja del Vino– para mayor comodidad de las familias con más de un hijo que tengan a un niño en edad escolar y otro en edad de ir a la guardería.

El ayuntamiento puede asumir la gestión del servicio, pero necesitaría ayuda de otras instituciones para llevar a cabo la obra de reforma.

La proximidad de Arcenillas, a siete kilómetros de la capital de la provincia ha permitido a este municipio incorporar a nuevos vecinos que buscan vivir en el campo con la comodidad de tener a cerca la ciudad. En los últimos 20 años el pueblo ha pasado de los 300 a los 420 habitantes.