La batalla contra el plástico y por un medio ambiente más saludable ha llegado a la localidad de Cañizal. Pequeños grandes gestos que son toda lección, como la que han dado los vecinos de este pueblo de la comarca de La Guareña con la elaboración de un árbol de Navidad a base de botellas de plástico.

Hasta 3.600 recipientes de plástico han utilizado los diseñadores de esta original obra navideña que cada noche ilumina la Plaza Mayor de Cañizal junto a un muñeco de nieve.

Con su alcalde Rubén Sierra Herrero a la cabeza, concejales del equipo de gobierno y vecinos han colaborado en la construcción del árbol. Alberto Montesinos Fernández, Pedro Antonio Araujo Torrecilla, Cristina Miguel Coco, Paula Moreno Sánchez, Sara Herrero Maíllo, María Vicente Castro, Silvia Sánchez García, Miguel Ángel González Sierra y Héctor Araujo Macías.

Las manos de todos ellos han permitido levantar el árbol con las botellas ensambladas que han ido recogiendo los vecinos y otras llegadas de una residencia de ancianos de Villaverde (Salamanca), recogidas por Olga Macías. Ha sido un trabajo de dos meses culminado el 17 de diciembre, cuando se procedió al encendido del árbol con la presencia de numerosos vecinos de Cañizal.

"Hemos querido crear un poco de conciencia ambiental entre los vecinos llamando la atención sobre el uso del plástico y la necesidad de reciclarlo" explicaba el alcalde Rubén Sierra. Un mensaje más que pertinente cuando se acaba de cerrar la cumbre mundial del clima sin un compromiso contundente que termine con la situación de emergencia climática que afecta al planeta.

Dentro del ambiente navideño, también se ha instalado un Belén en el Ayuntamiento y se han organizado actividades para niños, como manualidades, juegos, cuentos o teatro durante los días 23, 26 y 27 de diciembre.