El vicepresidente y portavoz de la Junta, Francisco Igea, confió ayer en no tener que acudir al juzgado para exigir al PSCyL una rectificación por su aseveración sobre el cierre de consultorios locales, y pidió propuestas y documentos al plan de reordenación de la sanidad rural que vayan más allá de la petición de dimisión de la titular de esta cartera, Verónica Casado, o de que no cambie nada para "quedarnos como estamos".

Igea replicó con ese argumento en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno a la denuncia del socialista Diego Moreno de que se van a cerrar 2.125 consultorios locales con el plan de reordenación de la sanidad rural presentado por la consejera Verónica Casado. "Es sorprendente", apostilló en referencia a que sigan con esa "mentira". Respondió también a algunos críticas vertidas en los últimos días contra el documento marco de la sanidad rural , como el presidente del Colegio Oficial de Médicos de Castilla y León, José Luis Díaz Villarig, quien la ha pedido "que no haga experimentos", y a CSIF que ha solicitado su dimisión. "Es una reforma que todos entienden que es necesaria, ha podido participar todo el que ha querido", aseveró en referencia a la crítica de los médicos de que no se ha hablado con nadie y al PSOE que declinó acudir a las reuniones en las que se negocia un pacto por la sanidad.

Recalcó que están dispuestos a escuchar todas las propuestas excepto la petición de dimisión de la consejera y "quedarse como estamos" y subrayó que es "difícil reunir un equipo" que conozca la atención primaria como el que existe en la Consejería de Sanidad.Igea reiteró que la petición de cita previa para la atención en los consultorios locales no significa su eliminación.