El Molino de Castilla de la localidad de Montamarta acoge, durante los últimos días del mes de julio y todo el mes de agosto, una muestra de pintura de Charo Antón que tiene a Montamarta como protagonista con un repaso sobre sus costumbres, sus paisajes y los edificios más emblemáticos del municipio como la ermita o lo que queda del convento de los Jerónimos sobre el que la autora quiere llamar la atención en vistas a una futura restauración al haber restos arqueológicos interesantes para explicar parte de la historia de estos monjes y de la propia localidad de Tierra del Pan.

El Molino de Castilla, que recientemente fue restaurado después de ser pieza fundamental en el día a día de la localidad de Tierra del Pan, acoge esta exposición que también versa sobre el paso del tiempo y que se puede ver en algunos de los cuadros costumbristas en los que se observan imágenes del siglo XX que ahora parecen lejanas. Una acuarela, de las dos presentes en la exposición, realizada en los años ochenta da fe del trabajo realizado por las lavanderas en el río, escena contemplada y abocetada a bolígrafo por la autora en una visita a este pueblo que terminaría por convertirse en su lugar de residencia y de trabajo artístico.

La muestra se divide entre una serie de 24 dibujos y aguadas a tinta china que dan cuenta de muchos de los motivos arquitectónicos singulares que aún se conservan en las casas de Montamarta, dos acuarelas, un dibujo al pastel y un conjunto de 18 óleos, en total más de 40 cuadros en los que las casas de Montamarta y los paisajes que se pueden ver desde ellas son las grandes protagonistas.

En la exposición, entre los cuadros de Charo Antón, también se puede ver el poema de Claudio Rodríguez "El cerro de Montamarta dice"rodeado por varios paisajes rojizos de la zona además de las vistas del jardín de Charo Antón en Montamarta. Paisajes estos que ha querido recrear la pintora imaginando que fueron los que inspiraron a Claudio Rodríguez para crear el poema que le dedicó al cerro de Montamarta.