Los galardonados con los premios "Un diez para diez", en reconocimiento a la labor profesional, esfuerzo o compromiso demostrado, recibieron ayer la correspondiente placa y escultura en un concurrido acto organizado en el salón multiusos de Cañizo, en el que estuvieron presentes el subdelegado del Gobierno Ángel Blanco y el presidente de la Diputación de Zamora, Francisco José Requejo.

Fueron premiados la estudiante Carolina Barba Vázquez, de Villárdiga; el escultor Raúl Moreno de Paz, de Villanueva del Campo; Petra Rodríguez Conde-Nemeth, de Prado; el equipo de editores de la revista "La Miaja", de Cañizo; la Asociación Cultural "La Fuentina", de Fuentes de Carbajal (León); la Fundación Rehabilitar y su directora Izaskun Villena, de Cuenca de Campos (Valladolid), "El Palomar del Camino, de Villalcázar de Sirga (Palencia); SMRC-Automovile, de Medina de Rioseco (Valladolid); y l Banda de Trompetas y Tambores San Roque, de Valderas (León).

El premio es acordado por las revistas de Castroverde de Campos (Zamora), Valdunquillo (Valladolid), Gordoncillo (León) y la Asociación Gebres, de Villamayor de Campos. Han galardonado modalidades como las artes plásticas, el asociacionismo, el compromiso en Tierra de Campos, la difusión comarcal, la iniciativa empresarial, la medicina, el mejor expedientes académico, la música y las revistas rurales.

Todos ellos recibieron un diploma y una escultura conmemorativa elaborada por Kádar Cerámica sobre diseño del terracampino Manuel Ezía, en atención a su labor profesional y cultural en Tierra de Campos. Un premio especial fue concedido a José María Collazos, de Tordehumos, por su investigación genealógica y como agradecimiento por su participación en la organización durante los pasados años. Los promotores de los premios "Un diez para diez" ponen de manifiesto que "la filosofía de estos premios comarcales es valorar el esfuerzo y la dedicación de personas implicadas con Tierra de Campos para mantener la población y la calidad de vida de la gente terracampina".