La localidad de Tolilla de Aliste y vecinos y amigos de los pueblos los cercanos daban ayer su último adiós a uno de sus hijos más querido: Elíseo Calvo Rivera, fallecido el pasado martes en Zamora capital a los 66 años de edad.

Persona abierta y sencilla, Elíseo, tras pasar la infancia en Tolilla, emigró y desarrollo la mayor parte de su vida laboral en la Universidad en las Islas Canarias, donde dejó muchos amigos. La muerte de Elíseo deja al pequeño pueblo alistano con sólo 18 empadronados.

Al jubilarse regresó a sus orígenes en tierras alistanas y en las elecciones municipales de 2015 fue candidato por el PSOE en el Ayuntamiento de Gallegos del Río. En junio de 2016 era nombrado concejal al dimitir el edil Oscar Rivera Rodríguez de Gallegos del Río.Una de las obras por las que más luchó fue por la mejora de la carretera que une El Sierro con Lober y Tolilla hasta Rabanales, aún pendiente de arreglar.

Elíseo Calvo Rivera se convirtió en un colaborador del sacerdote Teo Nieto Vicente en la parroquia de Tolilla, donde según manifiesta el sacerdote, "lo mismo limpiaba el templo, que leía en la misa" e incluso él fue el encargado de acondicionar el bauristerio y arreglar las goteras del recinto sagrado cuando las había. Ayer, el sacerdote invitó a los asistentes del funeral a "recordar la alegría de quien supo vivir la fiesta", Elíseo.

Desde el Ayuntamiento de Gallegos del Río se reconocia el trabajo y la labor de Elíseo Calvo Rivera y se agradecía su lucha para mejorar la calidad de vida en el municipio que integran Gallegos del Río, Domez de Alba, Valer, Tolilla, Lober y Flores.