Un conato de incendio hizo ayer saltar las alarmas entre el personal de la Consejería de Medio Ambiente dedicado a la extinción de incendios. La fuerte tormenta que hacia las 14. 00 horas azotó la Sierra de la Culebra dejó fuertes precipitaciones en puntos como Arcillera, donde el tráfico que pasaba por la N-122 se veía sorprendido y los conductores tuvieron que detenerse en el arcén. O como en Samir de los Caños, donde el bar de Agustina se inundó de agua. La tormenta dejó rayos que originaron un conato de fuego en Boya, que en plena Sierra de la Culebra, que fue extinguido gracias a la rápida respuesta dada por los medios de extinción.
