Confederación Hidrográfica del Duero aumentará la suelta de agua del río Tera desde el complejo de las presas de la Sierra Segundera de 0,8 metros cúbicos por segundo, el caudal ecológico, a dos metros cúbicos por segundos para intentar paliar el déficit de cauce aguas abajo del Lago, y tratar de paliar el problema de los lodos acumulados por el cauce.

Los responsables de CHD comunicaron este acuerdo con la empresa Endesa que gestiona los embalses aguas arriba del Tera, para aumentar el caudal y provocar el arrastre, aunque la cantidad prevista es poca para el tamaño del problema. Ante la Guardia Civil se han interpuesto las primeras denuncias de hosteleros afectados que han tenido que cerrar sus establecimientos al no poder hacer uso del agua de la red para prestar los servicios de hostelería y restauración.

El alcalde de Puebla, José Fernández, informaba ayer de la decisión de CHD, además de comunicar a la responsable de la Cuenca del inminente riesgo de nuevos arrases de lodos y cenizas, pero esta vez procedentes de las propias orillas del Tera y de su afluente el río Trefacio, depositados tras el descenso del nivel agua tras las riadas. Unos lodos que son especialmente preocupantes en la presa de Corneira, procedentes del río Trefacio que recoge las aguas de la vertiente sanabresa de la Sierra de Cabrera.

El alcalde constató además la ejecución de las medidas anunciadas el miércoles por Aquona: "estamos instalando los prefiltros que son las medidas añadidas que estamos poniendo, además de seguir con los camiones cisternas, y esperemos que dé resultado. Yo ya no sé si es mejor que llueva o no llueva, lo que nos urge es que podamos dar de momento un agua apta para el uso personal y doméstico".

Los camiones cisterna continúan llevando agua al depósito de Castellanos, desde el embalse de Cernadilla, para tratar de limpiar tanto el tanque, con capacidad para 800.000 litros, como la red de abastecimiento de Puebla y Castellanos. Las condiciones del agua que baja por el río Tera han mejorado solo ligeramente, al descender el grado de turbidez de las aguas, y ha despertado el interés de los visitantes que se acercan a ver el estado del río, como una familia que veranea en Otero de Sanabria que extrajo agua en una botella donde era visible la turbidez, aunque en menor grado que los tres últimos días. Preocupa el bajo caudal que corre por el río.

Sobre la presentación de las denuncias, el alcalde valoró que "es el procedimiento normal, que quién se sienta perjudicado recoja las facturas y envié sus reclamaciones a la concesionaria, y que la denuncia siga su trámite". La empresa Aquona también ha recibido numerosas reclamaciones de los usuarios y quejas telefónicas por las graves incidencias registradas en el servicio. Además de continuar con la distribución de agua en los depósitos instalados en Castellanos y Puebla, se están llenando depósitos de establecimientos hosteleros y particulares.

El descontrol ha quedado patente en un territorio que es ZEPA (Zona de Especial Protección para las Aves), la Sierra de Cabrera en su vertiente sanabresa que afecta a los municipios de Trefacio y San Justo, y sobre la propia cuenca que es Lugar de Interés Comunitario (LIC) del Tera y sus afluentes, que incluye el cauce del río Trefacio.

Los responsables de Confederación Hidrográfica no han informado de ninguna decisión a mayores que se pueda tomar, como la apertura de las presas con más problemas de sedimentación de lodos, en la presa de Playa Corneira y la presa de Castellanos, como han solicitado los ayuntamientos y pescadores aguas abajo. Tampoco hay constancia de un control y seguimiento o de medidas de prevención a los ayuntamientos, como hubiera sido lo oportuno en esta situación donde prolifera la falta de información y coordinación con las entidades locales afectadas y los ciudadanos.