La Mancomunidad Tierra de Campos perdió su motoniveladora en el incendio surgido en Quintanilla del Monte en la madrugada del lunes. La máquina se encontraba aparcada en la nave donde se formó el fuego, propiedad del alcalde de esta localidad, Miguel Barrero, y ardió junto al resto de vehículos y máquinas de la explotación agropecuaria del regidor.

La entidad intermunicipal utilizaba la motoniveladora para el mantenimiento de los caminos rurales, normalmente trabajaba cada semana un pueblo diferente de los 17 que componen la Mancomunidad. El último municipio en el que actuó fue Quintanilla del Monte, y al terminar la semana el operario decidió dejarla aparcada en dicha nave, con permiso de su propietario, porque iba a disfrutar de un permiso vacacional de 15 días con motivo de su boda, tiempo durante el cual la máquina permanecería parada.

La Mancomunidad se verá obligada a hacerse con una nueva máquina para el arreglo de los caminos, pues aunque posee una apisonadora, una barredora y camiones, esta era su única motoniveladora.

La motoniveladora fue precisamente uno de los primeros vehículos en arder el pasado lunes, pues se encontraba muy próximo a las pacas de forraje, según explica el ganadero propietario de la nave, que fue el primero en llegar al lugar una vez iniciado el fuego.

El montón de forraje continuaba ardiendo ayer con virulencia, aunque de manera controlada, y previsiblemente seguirá así durante algunos días a pesar de los esfuerzos de los bomberos voluntarios de Villalpando que ayer volvían a trabajar en el lugar. El calor de las llamas continúa deformando la estructura de la propia nave, tal y como aventuraba su propietario en declaraciones a este diario el pasado lunes. Sin embargo, la vida continúa para el ganadero, que ayer se tenía que encargar de denunciar los hechos en el cuartel de la Guardia Civil de Villalpando y ocuparse de la burocracia que exige la compañía aseguradora, mientras las llamas terminaban de destruir sus propiedades almacenadas en la nave.