El programa de voluntariado ambiental que desarrolla la Consejería de Fomento y Medio Ambiente, a través de la Fundación Patrimonio Natural, ha cubierto este año el 90,8 % de las plazas ofertadas.

En las Casas de Parque de la provincia de Zamora, de Arribes, Villafáfila y Sanabria, se organizaron siete actividades en las que tomaron parte un total de 199 los voluntarios ambientales. Con la intervención de los participantes se han llevado adelante obras de mejora y conservación del patrimonio, como limpieza de senderos y fuentes, y también, en el caso de la Casa del Parque El Palomar, de Villafáfila, anillamiento de aves.

Desde que comenzara su andadura en el año 2011, según informa la Junta, "han participado un total de 6.323 en las 363 actividades ofertadas, e indica que "esta iniciativa refleja el compromiso altruista y solidario de la sociedad con la protección del medio ambiente".

El programa de voluntariado ambiental ha finalizado su programación del 2016 con la participación más alta desde el comienzo de la iniciativa hace seis años: 1.542 voluntarios.

Casas del Parque y Centros Temáticos de la Comunidad que han tenido lugar en 19 espacios naturales de Castilla y León y otros cuatro entornos naturales vinculados a centros temáticos o ambientales.

Entre las actividades de voluntariado desarrolladas, destacan, las propuestas encaminadas a mejorar la conservación de la flora y la fauna; la restauración de elementos etnográficos y su puesta en valor; la mejora y limpieza de riberas y espacios públicos; acciones de divulgación y educación ambiental.

En los últimos seis años, periodo en el que la Fundación Patrimonio Natural se ha hecho cargo del programa, el número total de voluntarios ha sido de 6.323 y realizado 363 actividades.

La Consejería de Medio Ambiente señala que "este voluntariado tiene como objetivo convertirse en marco del fomento y apertura de nuevas fórmulas de participación de los ciudadanos en acciones que contribuyan al conocimiento, disfrute y puesta en valor del patrimonio natural, generando vínculos emocionales y posibilitando actitudes y comportamientos activos, mediante la creación de un tejido social a favor de la recuperación, la gestión sostenible y la divulgación de los valores del patrimonio natural".

Los beneficios del voluntariado van más allá de satisfacción personal y que permite alcanzar mayores niveles de protección, conservación y restauración de los espacios naturales. Apoya el desarrollo local sostenible y crea vínculos entre la realidad sociocultural de la población rural y la de la urbana a la vez que favorece la implicación de la población local en las actividades.

Las ofertas de actividades propuestas se desarrollan en cuatro áreas diferenciadas: para el público general; dirigido a las familias; para los mayores residentes en los espacios naturales (voluntariado sénior); y finalmente para colectivos, asociaciones o enfocado dentro de las acciones de Responsabilidad Social Corporativa de las empresas (RSC).