La Unesco ha incluido los Beatos Medievales de España y Portugal en el Registro de la Memoria del Mundo. La importante decisión afecta muy directamente a la villa de Tábara puesto que el Beato de Tábara es uno de los documentos que avalan la nominación y sitúan al libro caligrafiado por el monje Magius en el Scriptorium entre los documentos más relevantes del mundo. Este manuscrito, realizado en el Scriptorium del monasterio de San Salvador de Tábara en el siglo X, es uno de los códices más antiguos que se conservan del Comentario al Apocalipsis de San Juan, redactado en el siglo VIII por Beato, monje de Santo Toribio de Liébana.

Los catorce expertos que conforman el comité de asesores del Registro de la Memoria del Mundo de la Unesco se reunieron en octubre en la ciudad de Abu Dhabi y aprobaron las dos candidaturas propuestas por la Dirección General de Bellas Artes y Bienes Culturales y de Archivos y Bibliotecas del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte. Junto a la de los Beatos se proponía la serie de Vocabularios de lenguas indígenas del Nuevo Mundo, preservadas en el Archivo General de Indias. Ambas candidaturas, ahora confirmadas por la Unesco, otorgan a los documentos y códices históricos seleccionados una "especial protección y reconocimiento, no solo por su alto valor histórico en los contextos culturales de origen, sino por su importancia y significación para la Historia de la Humanidad".

La inclusión de los textos de los Comentarios al libro del Apocalipsis, compuestos por el monje Beato de Liébana en el antiguo reino de Asturias durante la segunda mitad del siglo VIII y por sus sucesores, fue propuesta en el año 2014 de manera conjunta por las Secretarías de Estado de Cultura de España y de Portugal.

Los Beatos o "Códices Beatos" son obras de carácter religioso, ilustradas con dibujos didácticos que trataban de ayudar a la comprensión de los textos sagrados. La candidatura propuso la inclusión en el Registro de la Memoria del Mundo de una relación de códices manuscritos y fragmentos de otros que se custodian en instituciones culturales públicas de España y Portugal.

Entre ellos está incluido el Beato de Tábara. Según detalla la memoria presentada a la Unesco, "el manuscrito fue restaurado y re-atado en el 1974 en el Centro Nacional de Restauración de Libros y Documentos, dependiente del Ministerio de Educación". En la actualidad forma parte de la colección medieval del Archivo Histórico Nacional (Madrid), "en el que podría haber sido incorporado entre los fondos documentales y codicológicos de la antigua Escuela Diplomática, cerrado a principios del siglo XX, que, a su vez, tendría adquirido de Ramón Álvarez de la Braña (León)". En su tesis, Gregorio de Andrés indica que probablemente este códice "podría ser el que estaba en la Biblioteca del Monasterio de Guadalupe (Extremadura), entre 1570 y 1770, que contiene la firma de un cierto "Emeterio" y de alguna manera terminó en la ciudad de León".

Entre los valores destaca que los Beatus representan "una transición cultural y escritural única que marca el paso del antiguo al mundo medieval". Se afirma que todas las bibliotecas europeas de importancia en esa época tenían uno de estos códices.

Los Beatos ibéricos son una de las primeras expresiones del arte iconográfico europeo y, en particular, son una serie de manuscritos en los que el estudio de toda su tradición ha proporcionado los conocimientos sobre el funcionamiento de las bibliotecas. En concreto, el Beato de Tábara "contiene lo que es actualmente la única imagen de la época que muestra el trabajo que se lleva a cabo en un scriptorium" precisa el documento en poder de la Unesco. En el plano artístico, son códices únicos en cuanto a la estética y sistemas iconográficos que transmiten.

Sus características iconográficas, artísticas y culturales singulares han tenido repercusiones significativas, incluso en el mundo cultural de hoy. El pintor Pablo Picasso encontró la inspiración para muchas de sus obras en las composiciones y combinaciones de colores de los Beatos. En la nominación presentada a la Unesco se hace referencia expresa al Beato de Tábara, pues con sus textos y dibujos de la torre-scriptorium de San Salvador, "sirvió de inspiración" para la novela de Umberto Eco "El nombre de la rosa". El laberinto de conocimientos que dio lugar a la estructura de la biblioteca de la abadía, donde la novela se desarrolla, "se inspiró en el laberinto del scriptorium torre que contiene el Beato de Tábara".

Los manuscritos incluidos en este reconocimiento son: Apocalipsis de Lorvão, (Portugal), Comentario al Apocalipsis de Beato de Liébana, Alcobaça Codex (Portugal), Escorial Beatus 1 (España), Escorial Beatus 2 (España), San Millán Beatus (España), Tábara Beatus (España). San Millán Beatus (España), Beato de Fernando I y doña Sancha (España), Beato de Cardeña (España) y Beato de ACA (España).