Los feligreses de El Perdigón hacen piña durante estos días y trabajan a destajo para poner en alza las tres procesiones con las que cuenta este pueblo en Semana Santa.

Unos desfiles que muestran bien a las claras el interés de la hermandad de Nuestra Madre de las Angustias, que es la cofradía madre, con 380 hermanos, y a partir de ella los cofrades han trabajado en la creación de otras dos nuevas hermandades. Es el caso de la penitencial que sale a las once y media del miércoles Santo, con la talla del Cristo de la Misericordia donado por el Seminario y que este año incorpora notables novedades, como el campanil que han diseñado Rocío Fonseca y Flor Vaquero, que recuerda al del Espíritu Santo de Zamora, aunque algo más modesto y forrado en pan de oro. También el pendón, donado por Isidoro Corral o los báculos de la abadesa y el viceabad, entregado también por Domingo Barrios y Flor Vaquero.

La cofradía del Cristo de la Misericordia, formada por 50 hermanos, desfila con túnica monacal de color crudo y recorre las calles del pueblo, portando los hermanos teas, hasta llegar a la Plaza Mayor, en medio de la oscuridad. A su paso el Ayuntamiento reduce la iluminación para que resalte más impactante el desfile procesional.

El Jueves Santo, y tras cuatro años desde su constitución, la Cofradía de Jesús Nazareno estrena también estandarte. A las seis y media de la tarde está previsto que salga a la calle el Nazareno, acompañado por la música de la banda de tambores local.

En esta ocasión los hermanos desfilan con túnica color crudo y capuchón morado.

El Viernes Santo es cuando la cofradía más antigua del pueblo, la de Nuestra Madre de las Angustias, estrena también una cruz guía y suma y sigue en el número de cofrades, «pues este año se han incorporado treinta personas más», explica el presidente, Alfonso Fonseca. Durante la Semana de Pasión en los balcones de las casas de la Plaza Mayor lucirán los reposteros de las tres cofradías.

La Semana Santa de El Perdigón es una de las que mayor auge está teniendo en los últimos años en la comarca, gracias al impulso de un grupo de entusiastas. El modelo elegido es claramente la Semana Santa de Zamora, pero no como mera imitación, sino con la creación de vestimentas y usos con estilo propio, en los que destaca el buen gusto. Y todo a base de entrega y trabajo personal, más que de dinero.

Prueba de esta puesta en valor son los 250 carteles que se han editado este año con la imagen de Nuestra Madre de las Angustias, que es el paso que antiguamente desfilaba en Zamora, y la distribución de 500 itinerarios que serán repartidos para que los fieles puedan seguir, minuto a minuto, el paso de las procesiones.

Los sacerdotes Mario Manso y José Ferrero son los encargados de la parroquia de San Félix de El Perdigón y para la procesión del Miércoles Santo se espera la presencia del rector del Seminario, que presidirá el desfile.