La Guardia Civil interviene más de 22.000 prendas falsificadas en la frontera de Fuentes de Oñoro

La Guardia Civil de Salamanca, a través de la Patrulla Fiscal y de Fronteras (Pafif) y en el marco de la operación ‘Fake Star II’, intervino en las inmediaciones del paso fronterizo de Fuentes de Oñoro un total de 22.020 prensas falsificadas, cuyo valor original supera los 773.000 euros, e investiga al conductor del camión interceptado.

Según informó este miércoles la Guardia Civil, la operación se encuadra en un plan operativo europeo cuyo objetivo es la cooperación internacional para detectar y combatir el comercio ilícito de falsificaciones de ropa, calzado y complementos. Durante el verano, eso sí, los agentes han intensificado los puntos de verificación de vehículos de transporte a lo largo de la demarcación en aquellos lugares sensibles al paso de este tipo de mercancía ilícita.

Las falsificaciones saltan del top manta a las pantallas

Así, los agentes de la Patrulla de Fiscal y Fronteras de Fuentes de Oñoro realizaron el pasado 8 de julio un operativo de inspección en un punto ‘caliente’ de su demarcación y procedieron a dar el alto a un camión de gran tonelaje. Al escudriñar los documentos de acompañamiento de la carga les llamó la atención la gran variedad de mercancía sin determinar que transportaba, por lo que decidieron proceder a la apertura e inspección del semirremolque del vehículo.

Una vez comprobada la carga que transportaba, pudieron determinar que en su interior había, entre otros, ocho pallets con grandes bultos que contenían un total de 128 cajas de cartón. Los agentes procedieron a su apertura y se encontraron gran cantidad de ropa, en total 22.020 camisetas, con claros indicios de ser falsificaciones de diversas marcas conocidas y registradas, así que procedieron a su aprehensión. 

El conductor del vehículo pasó entonces a la condición de investigado y la mercancía intervenida fue puesta a disposición del Juzgado en funciones de Guardia. Tras el posterior peritaje por parte de los representantes de las ocho marcas legalmente comercializadas que estaban afectadas, se certificó que realmente eran prendas falsificadas, con un valor aproximado de las originales de 773.600 euros. Se instruyeron entonces diligencias por un supuesto delito contra la propiedad industrial, en lo que supone una de las mayores incautaciones de prendas falsificadas de los últimos años, evitando su comercio ilícito en el mercado textil europeo.