Siete detenidos en El Espinar en la desarticulación de un grupo vinculado a una banda latina violenta

Es la primera vez en Castilla y León que tiene lugar una intervención de este tipo en el medio rural

La delegada del Gobierno en Castilla y León, Virginia Barcones, presenta una operación conjunta desarrollada en la provincia de Segovia por Guardia Civil y el Cuerpo Nacional de Policía contra una banda de menores, acompañada por el general jefe de la XII Zona de la Guardia Civil, Luis del Castillo, y el jefe autonómico de Operaciones de la Policía Nacional, Jesús del Amo

La delegada del Gobierno en Castilla y León, Virginia Barcones, presenta una operación conjunta desarrollada en la provincia de Segovia por Guardia Civil y el Cuerpo Nacional de Policía contra una banda de menores, acompañada por el general jefe de la XII Zona de la Guardia Civil, Luis del Castillo, y el jefe autonómico de Operaciones de la Policía Nacional, Jesús del Amo / Nacho Valverde

La Guardia Civil y la Policía Nacional, de forma conjunta, dan por desarticulado, en el municipio de El Espinar (Segovia), un “incipiente bloque” de la banda latina juvenil y violenta ‘Blood’, con un total de siete detenidos. El líder fue enviado por el Juzgado de Menores a un centro de internamiento de régimen cerrado. Había huido de Madrid al estar “en el punto de mira” de una banda rival, según destacó la delegada del Gobierno en Castilla y León, Virginia Barcones, y se instaló en Los Ángeles de San Rafael. Los otros seis implicados están sus domicilios.

La operación de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, denominada ‘Acacias Azuvera’ sigue en secreto de actuaciones y se mantiene abierta. Barcones también destacó que es la primera vez que, en Castilla y León, se desarticula un bloque de una banda violenta que capta jóvenes vulnerables y realiza diferentes actos delictivos, en el medio rural, en “territorio de la Guardia Civil”. La Policía Nacional sí ha tenido alguna intervención de este tipo en capitales de provincia. 

Barcones explicó que el operativo para desmantelar este bloque tuvo lugar el pasado 4 de julio, en San Rafael, El Espinar y Los Ángeles de San Rafael. Se les imputan delitos de coacciones, amenazas y pertenencia a organización criminal, entre otros. La investigación lleva en marcha desde abril, a raíz de la detección por parte de agentes de la Guardia Civil especialistas en grupos de violentos juveniles por los altercados y hechos delictivos, “por un grupo de jóvenes que estaba causando cierta alarma social en localidades del sur de la provincia de Segovia”, sostuvo Barcones. 

De Madrid a Segovia 

El líder y fundador de este ‘bloque’ era “un conocido y destacado miembro de la banda latina ‘Blood’, que nació en Los Ángeles, en el año 1972 y después se extendió por Europa. Los miembros de la banda llevaron a cabo peleas y robos con violencia en el interior de vehículos y de domicilios. Actos que eran impulsados, bajo la dirección de esta persona que se publicitaba como líder de una banda violenta con fines delictivos. Este miembro destacado de los ‘Bloods’ tenía el objetivo claro de crear un nuevo ‘bloque’ en la provincia de Segovia.

El joven cambió su lugar de residencia desde Madrid a la localidad segoviana de Los Ángeles de San Rafael con la intención de ocultarse de una banda rival que lo tenía en su punto de mira. Una vez allí, y cumpliendo las órdenes de los responsables a nivel nacional de la banda, comenzó a realizar labores de proselitismo y reclutamiento de nuevos miembros para integrarles en el seno de la misma y crear un grupo violento propio.

Según el relato de Guardia Civil y Policía Nacional, consiguió captar a varios jóvenes y erigirse como líder de un ‘bloque’ de ‘Blood’ dirigiendo su actividad y coordinando la realización de robos con fuerza en domicilios y vehículos y agresiones y enfrentamiento contra grupos y bandas rivales.

La delegada del Gobierno hizo especial hincapié en que estas labores de captación eran realizadas principalmente en centros escolares e institutos, así como lugares de reunión para jóvenes y adolescentes como centros deportivos, parques y centros educativos, colegios e institutos. Además, el líder usaba sus perfiles en redes sociales para publicitar sus ideales y hacer apología del uso de la violencia contra miembros de bandas rivales. Una vez se incorporaban nuevos miembros a la banda, estos eran obligados a crear perfiles para tener mayor visibilidad los jóvenes de la zona.

De esta manera, para conseguir los propósitos del líder, el grupo cometía hechos delictivos en estas localidades del sur de la provincia de Segovia, principalmente robos, y agresiones que llevaban a cabo de forma grupal, organizada y violenta, amenazando a los miembros que se negaban a participar en ella, ya que es habitual, en este tipo de bandas juveniles violentas, que los miembros, con la falsa promesa de alcanzar un estatus de mayor poder dentro de la organización y contar con protección por el resto de miembros y un fuerte sentimiento de pertenencia, sean inducidos o incluso obligados bajo amenazas por los miembros de mayor rango a cometer actividades ilícitas.

El rango de edad para efectuar el reclutamiento se situaba principalmente entre jóvenes, quienes presentan una vulnerabilidad y se integran en una posición jerárquica de menor peso dentro de la misma. Tras varios meses de profunda investigación, los agentes llevaron a cabo la explotación de la operación y realizaron varios registros donde se intervinieron numerosos efectos necesarios para la continuación de la investigación y que corroboran los hechos que dieron inicio a la investigación.

En el dispositivo policial especial desplegado han participado agentes de la Jefatura de Información (UCE-3) y el Grupo de Información de la Comandancia de Segovia, por parte de Guardia Civil; y por parte de Policía Nacional de agentes de la Comisaría General de Información y la Brigada Provincial de Información de Segovia.

Fue necesario, por las características del operativo, el apoyo de equipos técnicos, como especialistas informáticos y tecnológicos, guías caninos y dada la peligrosidad con la que habitualmente actúan este tipo de grupos juveniles violentos, ha sido precisa la intervención de la Agrupación de Reserva y Seguridad (ARS) y de la USECIC de la Comandancia de Segovia de la Guardia Civil. La investigación fue liderada por Fiscalía de Menores de Segovia y el Juzgado de Menores de Segovia.

Con esta operación, remarcó Virginia Barcones, se da por desmantelado este grupo violento vinculado a ‘Blood’ que, además de significar 'sangre' en inglés, es acrónimo de 'Brotherly Love Overcomes Oppression and Destruction' (El amor fraternal supera la opresión y la destrucción). Sus miembros usan simbología propia y distintiva, como marcas de la ropa concretas o uso del color negro y rojo y portan bandanas, collares y pulseras con las que muestran su compromiso y posición dentro del grupo.

En permanente vigilancia

La delegada del Gobierno en Castilla y León se mostró especialmente satisfecha de la colaboración de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, que son “independientes” pero con una alta capacidad de coordinación y compenetración, siempre “en pro y beneficio de los ciudadanos”. Además, Barcones lanzó un mensaje claro y contundente de la labor de vigilancia que llevan a cabo Policía Nacional y Guardia Civil, “en permanente estado de alerta” para evitar que, en Castilla y León, se puedan asentar cualquier banda de este tipo. “No tengan dudas de que será desarticulado como en este caso”, manifestó.

Barcones resaltó que es “prioritario” impedir estos hechos delictivos, la implantación de bandas violentas, que realizan la captación de jóvenes en lugares frecuentados por ellos. “Los ojos de Policía Nacional y Guardia civil están permanente encima” y cualquier intento, como el ocurrido en la provincia de Segovia, será desarticulado y con su líder “en un centro de internamiento que es donde le corresponde”.